El juez federal, Julián Ercolini, dispuso la inhibición general de bienes del exPresidente Alberto Fernández y también ordenó levantar el secreto fiscal y bancario sobre sus cuentas.

Cada vez más complicado

Todo comenzó con una auditoría ordenada por el actual Gobierno en el Programa de Atención Médica Integral para jubilados (PAMI). Se verificó que en los préstamos que se ofrecían a personas jubiladas se cobraba de modo obligatorio una alta póliza de seguro ante la posibilidad de fallecimiento del titular, que llegaba al 10% de cada cuota.

De una irregularidad más, de las tantas descubiertas hasta ahora, la investigación fue descubriendo nexos que confluían en el exPresidente Alberto Fernández. A tal punto que quedó implicado él, su secretaria y cerca de treinta funcionarios y allegados.

La contratación de dicha póliza, que solo podía hacerse en Nación Seguros, era obligatoria para todos los organismos públicos. En cada contratación había intermediarios que obtenían comisiones previamente estipuladas, por lo que están investigados, Alberto Pagliano, ex titular de Nación Seguros, y Héctor Martínez Sosa, esposo de la secretaria privada de Alberto Fernández, María Cantero, quien también integra la lista de supuestos beneficiados con la maniobra.

El mecanismo de la corrupción

En síntesis, el sistema de corrupción consistía en que el expresidente emitió un decreto ordenando que todos los organismos del Estado contraten de manera directa pólizas de Nación Seguros. Cabe mencionar que durante el Gobierno anterior a Fernández, el de Mauricio Macri, esto se realizaba mediante licitaciones públicas.

 La obligación de contratación se completaba con una ineludible intermediación de terceros que recibían una comisión previamente estipulada. La gran mayoría, o las más cuantiosas, recaían en Martínez Sosa. Luego, se procedía a realizar un coaseguro en otras empresas aseguradoras, gestión donde también los mismos intermediarios percibían una nueva comisión.

Mi secretaria se extralimitó

Ya en el pasado mes de febrero, cuando la investigación comenzaba a señalar a Alberto Fernández, este se exculpó acusando a su secretaria: “Yo no pedí por nadie, y si mi secretaria lo hizo, se extralimitó”.

El juez Ercolini dio intervención a la Oficina Anticorrupción, a fin de que aporte las declaraciones juradas de los implicados. De todas maneras, este tipo de maniobras siempre quedan cubiertas con declaraciones de bienes irrisorias y que no condicen con el nivel de vida que llevan los acusados. Cabe recordar que el expresidente siempre afirmó que vivía en un departamento prestado antes de asumir como presidente.

Hoy tiene importantes propiedades en España, donde está asentada su concubina e hijo, y donde él tiene planes de trasladarse en un futuro que hoy aparece oscuro debido a la investigación en curso.

Otros tiempos. Alberto Fernández cuando era profesor adjunto de “Teoría del Delito” en la Facultad de Derecho de Buenos Aires.