Ministro de Economía, Luis Caputo.

Finalmente, tras algunas dilaciones técnicas, el ministro de Economía argentino, Luis Caputo, presentó las primeras medidas económicas. En el transcurso de la semana se anunciarán nuevas decisiones.

Estamos mal, y estaremos peor

Estamos mal, y estaremos peor, dijo el ministro debutante, pero agregó que es un paso necesario para comenzar a corregir los datos negativos de la economía y evitar una inminente hiperinflación.

• Del conjunto de 10 medidas anunciadas, lo que atañe directamente a la población a partir del miércoles 13 de diciembre, es la devaluación de la moneda en 55%, dato que convalida parte del valor del dólar extraoficial. Si bien, la moneda argentina, aún luego de la devaluación, mantiene un retraso de un 25% que será corregido en los próximos meses.
• El dólar utilizado en tarjetas de créditos tendrá un valor similar a la paridad real estimada; 1.280 pesos.
• Se quitarán los subsidios estatales a combustibles, transportes y servicios de energía y sanitarios, lo que significará aumentos de entre 100 y 200% en las próximas facturas de electricidad, gas, servicios sanitarios y valor del boleto en los servicios de transporte.
• La inflación crecerá de manera pronunciada en los dos o tres meses próximos al liberar los controles de precios y restricciones impuestas por el gobierno anterior.  Parte de este impacto se asimiló en las dos últimas semanas por aumentos de precios en góndolas del 100 al 300% en algunos productos.
• La medida electoralista que empleó el candidato peronista Sergio Massa, de eliminar el impuesto a las Ganancias para amplios sectores, fue anulado. Por lo que muchos trabajadores con sueldos importantes verán diezmados sus ingresos.

Achicando el Estado

Entre las medidas de reducción del gasto estatal se destacan la suspensión por el lapso de un año de la pauta oficial. Es decir, no habrá publicidad paga de los actos de gobierno en los medios de comunicación.

• No se renovará ningún contrato de personal realizado en el último año (2023) en el Estado. Se redujo la cantidad de ministerios de 18 a 9 y las Secretarías de 106 a 54. Su personal pasaría a disponibilidad. El Estado no hará más obra pública y suspenderá todos los contratos que aún no hubieren comenzado. También, revisarán todos los contratos en curso y de detectarse anomalías, se procederá a enjuiciar a los responsables.

• Por último, no habrá más giros discrecionales de fondos a las provincias. Se presume que los pedidos de fondos por parte de los gobernadores serán atendidos a cambio de apoyo a medidas en el Congreso de la Nación.

Hay más impuestos

Según expresó el ministro Caputo, el aumento del impuesto a las exportaciones pasó al 15%, pero será transitorio hasta el mes de marzo. En medios agropecuarios consideran que si bien ese aumentó se compensa con el mejor valor del dólar para exportar. Igual, es visto con recelo, ya que Milei había prometido eliminar ese impuesto desde el primer día de gobierno. Pragmatismo.

Una medida que causó desagrado fue el aumento de la ayuda social (planes sociales) en 100%. De todos modos se trató de dos planes de menor valor: AUH (Asignación Universal por Hijo) que significan unos 20 mil pesos por niño (unos diez dólares), y tarjeta Alimentar, otros 20 mil pesos mensuales por persona. El resto queda congelado.

El fundado malestar fue que el peso de la crisis deben pagarla todos, siendo que los jubilados subsisten con ingresos magros y no pueden trabajar. Mientras que los beneficiarios de la ayuda social son todas personas jóvenes con capacidad de desempeñar tareas.