• Guillermo Zúñiga, ex guía de Autos
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Porsche nació luego de la incursión de Ferdinand Porsche durante el gobierno Nazi con el Volkswagen escarabajo encargado por el mismísimo Hitler. Luego de la Segunda Guerra se fundó la marca Porsche concretando un diseño de un deportivo de pequeñas dimensiones utilizando mayormente piezas del viejo Escarabajo. Después de deambular entre Alemania y Austria, finalmente Porsche se estableció en Alemania luego de una gran década de éxitos basados en el 356, Ferry, el hijo de Ferdinand diseñó el que sería el sucesor, el Porsche 901.

Peugeot reclamó la patente de todos los nombres de autos de 3 dígitos con un cero en medio, por lo que simplemente el modelo se llamó 911. Desde su lanzamiento en 1964 hasta el día del hoy el 911 se ha mantenido sin ningún tipo de interrupción en el mercado mundial. El 911 conservó varias piezas del 356 y básicamente la estructura del Escarabajo.

A través de sus distintas generaciones el 911 conquistó difíciles mercados como el estadounidense a pesar de tener características básicas como un motor enfriado por aire y prácticamente colgando tras el tren trasero. Su balance siempre lo ha hecho un auto peligroso, pero no menos eficiente que otros deportivos de mayor valor.

Su motor boxer de 6 cilindros de inconfundible sonido sólo ha evolucionado a través de los años y jamás ha sido totalmente cambiado. Quizás la mayor innovación sufrida fue en la generación 996 a finales de los años 90′ cuando se incorporó la refrigeración por agua, ausente desde su creación en 1964.

Desde los años 70 hasta entrados los 90, sus generaciones conservaron piezas intactas en su diseño, como los vidrios, manillas, puertas o capó, sólo en el cambio de la generación 964 a la 993 estas piezas se rediseñaron ¿la razón? simplemente porque no era necesario mejorarlas, funcionaban bien y el diseño era exitoso.

Foto: Agencias

La tenista rusa Maria Sharapova posa junto al Porsche 911.

Grandes bólidos de competencia se basaron en el 911, como el 935. Varios exitosos 911 evolucionaron para competir  en el mundo de los deportivos de altas prestaciones. A finales de los años 70 llegó el turbo y con ello versiones más radicales. Hoy el 911 domina tanto en el mercado de los deportivos como en las pistas de carrera a través del mundo.

El Porsche 911 no sufrió las embestidas de las crisis económicas o de petróleo, no pasó a manos de otros diseñadores y jamás se detuvo su producción, sólo evolucionó a través de los años, ostentando el título del deportivo más exitoso de todos los tiempos.