Collage: InfoBAE

La fama les llegó a lo grande y la realidad se impuso: Cuando te sacas la lotería, no tiene sentido rechazarla; al fin de cuentas no has hecho mal a nadie y un artista gana su fortuna en buena ley. Pero antes de que golpeara a sus puertas, muchos de los más grandes actores habían desarrollado su talento en profesiones y estudios académicos.

El caso de Natalie Portman es uno de los más conocidos. Se anotó en Psicología justo cuando su carrera en cine apuntaba a dispararse hacia lo más alto… y se graduó. Comenzó sus estudios en Harvard en 1999 junto al estreno de la segunda saga de “Star Wars” y egresó cuatro años después. Una declaración posterior de Natalie resumió todos los prejuicios al respecto: “No me importaba si los estudios arruinaban mi carrera; prefiero ser educada que actriz”.

Psicología es una de las carreras más serias, ¿cierto? Pero también lo es el profesorado de historia. Edward Norton estudió en Yale y la eligió porque pensaba que podía sumarle como actor.

Gerard Butler es otro que, antes de los años de excesos por su estallido popular, decidió anotarse en la universidad. Presidió la sociedad de derecho de la Universidad de Glasgow, donde se recibió como abogado. El hombre estudiaba antes que el cine lo descubriera. Luego debió dejar los estudios: En plenos excesos de mujeres y famas, el hombre recordó sus carrera interrumpida y paralizó los rodajes por un año para retomar su compromiso.

Seguro recuerdas a “Phoebe”, de Friends. Lisa Kudrow se recibió de bióloga en el Vassar College de New York. Un dato poco conocido: Trabajó durante ocho años junto a su padre doctor en un estudio sobre diversas cefaleas.

Más: Rowan Atkinson es ingeniero (Oxford). Steve Carell, historiador (Granville, Ohio). Marche un último e interesante caso: Kevin Costner es licenciado en Administración de Empresas y tenía un muy buen trabajo cuando se cruzó en un avión con el actor Richard Burton. Hablando, le comentó que, en realidad, su sueño era ser actor. El hombre le dijo que uno debía luchar por cumplirlo. Al bajar del avión, Kevin buscó un teléfono y renunció a su empleo. Así comenzó una larga lucha hasta llegar al estallido de “Danza con Lobos”, “Los intocables”, “El guardaespaldas” y “Robin Hood”.