Robert de Niro conoció a la actriz y cantante Grace Hightower en 1987. Diez años más tarde se casaron y se convirtieron en una pareja estable y de perfil bajo. Sin embargo, ya no es así: tras solicitar el divorcio en 2018, la separación no se dará en los mejores términos.

Tras casarse en 1997, la pareja se separó en 1999, pero tras algunas idas y vueltas, volvieron a estar juntos y el divorcio nunca se concretó. En 2004, sin embargo, decidieron dejar la cosas claras al renovar sus votos y firmar un contrato prenupcial. Pero luego de años de estabilidad, aquel acuerdo hoy vuelve a ser protagonista.

El contrato prenupcial estipulaba que, es caso de separación, Grace Hightower recibiría un apartamento avaluado en seis millones de dólares, además de medio millón de dólares en efectivo y una pensión anual de un millón de dólares. Sin embargo, la actriz ahora le exige a Robert de Niro la mitad de su fortuna.

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Según informa El País, Hightower reclama la mitad del patrimonio del actor, valuado en 500 millones de dólares. La actriz alega que de Niro ha amasado esa fortuna durante el tiempo que estuvieron casados, gracias a su participación en 38 películas e inversiones en otros rubros, como la cadena de restaurantes de sushi Nobu, hoteles y productoras de cine.

“Se está dedicando a buscar básicamente cada pequeño recibo de las comidas, los gastos, los cargos de tarjeta de créditos y los pagos a cada empleado de Nobu”, afirman los abogados del actor de “Taxi Driver”.

La batalla legal recién comienza y promete convertirse en una larga y tediosa disputa con millones en juego. De Niro, de 75 años, y Hightower, de 63 años, tienen dos hijos en común: Elliot, nacido en 1998 y Helen, nacida en 2011 mediante un vientre en alquiler.

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