Robert De Niro ocupa un lugar privilegiado en el Olimpo de Hollywood, considerado desde hace años como uno de los mejores actores de todos los tiempos. Los premios lo avalan: estuvo nominado al Óscar en siete oportunidades y lo ganó dos veces.

Su rostro de hombre duro lo ha llevado a interpretar desde un mafioso en “El Padrino: Parte II” (1974), un veterano de Vietnam en “Taxi Driver” (1976) y un boxeador en “Toro Salvaje” (1980). Pero también ha destacado en otro tipo de personajes, mostrando su lado más emotivo como un hombre enfermo en “Despertares” (1990) o explotando su veta cómica en la saga de “La familia de mi novia” (2000).

A sus 76 años, y tras décadas dando vida a variedad de personajes con valores morales de lo más diversos, Robert De Niro ha confesado que hay un rol que no interpretaría jamás.

En una entrevista concedida a Infobae, el actor repasó su carrera y no dudó en responder cuál es el papel que se negaría a aceptar: “¿Si hay algún rol que nunca aceptaría interpretar en mi vida? Hay uno: Donald Trump.”

Si bien el actual presidente de Estados Unidos no cosecha demasiada simpatía en Hollywood, De Niro ha sido de los más críticos, incluso antes de que el mandatario ganara las elecciones de 2016. En aquel año, ya le había dedicado un video: Robert De Niro mostró toda su rabia contra Trump: lo tildó de ‘cerdo’ e ‘idiota’

Al actor no es ajeno a la situación social y ha demostrado su compromiso ante las crisis en varias oportunidades. En 2002, después del atentado a las Torres Gemelas, creó el Festival de Cine de Tribeca, para ayudar a sus vecinos de Nueva York a recuperar la actividad después de la tragedia.

Por estos días, el festival ha tomado formato online y De Niro ha iniciado una campaña para juntar fondos para la lucha contra el COVID-19: ha ofrecido pasar un día en el estudio de cine con Leonardo DiCaprio y Martin Scorsese a cambio de donaciones de alimentos para ayudar a los más afectados por la crisis sanitaria.

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