Existen momentos en los que una persona puede compararse con los demás. La envidia propicia este tipo de observación. Sin embargo, la verdadera felicidad no surge de esta forma de interpretar la realidad. En el canal de coaching de Guioteca te damos diez razones para no compararte con tus amigos:

1. Tus circunstancias son diferentes. Aunque existen factores que están presentes en la vida de distintas personas, cada biografía muestra el relato de una historia totalmente única. Ten en cuenta que cuando te comparas con tus amigos, no contemplas todos los factores externos que forman parte de sus vidas (porque no conoces todos los detalles).

2. Mereces ser amable, cercano y respetuoso contigo mismo todos los días de tu vida. Y, sin embargo, el diálogo interno que acompaña a esta comparación interpersonal no es agradable.

3. ¿Quieres ser el verdadero protagonista de tu propia vida? Entonces, no te comportes como un espectador del éxito ajeno. Cuando te comparas con alguien de forma frecuente, desvías el foco de atención de aquello que es verdaderamente importante.

4. Tu historia de superación es única. Y las personas que te rodean también tienen su propia autenticidad.

5. Valora de forma objetiva todo aquello que forma parte de tu vida (también de tu pasado). Todas las experiencias que has tenido te aportan un importante aprendizaje. Sin embargo, el tiempo que dedicas a compararte con los demás no lo inviertes en un fin más productivo.

6. Cuida tu autoestima con palabras y gestos amables. Y, para lograr ese objetivo, puedes implementar algunos cambios en tu vida. Analiza con sinceridad cómo te hace sentir el momento en el que te comparas con alguien como si ese amigo fuese más perfecto que tú.

7. Libertad interior. Tu ser y tu esencia se expanden cuando te hablas a ti mismo con amor. Pero se produce el efecto contrario cuando te encasillas en la perspectiva de una comparación que no tiene sentido.

8. Cultivar la admiración. Puedes aprender de tus amigos, y sentir una admiración sincera hacia ellos. Pero la comparación constante deja poco espacio para este tipo de sentimiento.

9. Reconocer la belleza que hay en ti. No la percibes realmente cuando te distancias de ti mismo por esta circunstancia.

10. Esta perspectiva no te deja ver los matices que, sin embargo, enriquecen cada historia.

¿Qué otros aspectos te gustaría comentar sobre este tema en el canal de Coaching de Guioteca?