• Gustavo Davila, ex guía de Colo Colo
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Cuando el fin de año se acerca a pasos agigantados, pocas veces se había visto que los dos torneos más importantes que se disputan en el país, llegaran a su término en el mismo tiempo y que hubiera al menos dos equipos con posibilidades de llevárselo todo: Colo Colo y Universidad de Concepción. Sin embargo, esta particular situación, se vio completamente ensombrecida por los sucesos acaecidos en la última semana, una de las más movidas noticiosamente en la historia del fútbol chileno.

Luego de su formalización, Esteban Paredes deberá firmar mensualmente mientras dure la investigación.

El caso “televisores”, que involucra a los ídolos populares Esteban Paredes y Justo Villar, amenazaba con tornarse una piedra de tope para la preparación, que Colo Colo realiza para llevarse el Torneo de Apertura y la Copa Chile, pero sin embargo como una “bendición”, todo sucedió en medio de un intermedio (uno de demasiados que ha tenido el semestre) por las eliminatorias mundialistas, donde no solo Chile logró una pésima cosecha (la peor en una fecha doble desde que el entrenador es Jorge Sampaoli), sino que además y como se veía venir, la administración de Sergio Jadue al mando de la ANFP, llegó a un abrupto final, con el calvo calerano, en manos de la justicia norteamericana.

Dicha situación, y como era de esperarse, copó todo el espacio deportivo en los medios de comunicación, que esta semana, sin duda, buscaban ajusticiar a Paredes y Villar por su roce con la justicia. Cabe aclarar en todo caso, que el traer este caso a colación de esta forma, no exonera bajo ningún punto de vista a los involucrados, que participaron a las claras en un suceso donde al menos tendría que haber existido la sospecha (por parte de al menos el principal involucrado Esteban Paredes), de un acto ilícito y tendrán que pagar por eso ante la justicia. Para cerrar el paréntesis y luego de las disculpas públicas del goleador albo, esperemos que sea un caso que sirva de lección no solo a los involucrados, sino a los adultos y niños que siguen a estos ídolos, como una situación que no se debe realizar bajo ninguna circunstancia.

Pero Colo Colo debe dejar de lado esta vorágine de situaciones atrás y ganar las cinco finales que le quedan por delante (suponiendo que llegará a la final de Copa Chile). Al salir esta nota, ya se sabrá cual será el primer finalista de Copa Chile, donde la principal novedad, es que para variar, Colo Colo ya tiene un jugador suspendido para los dos hipotéticos encuentros que quedan: Claudio Baeza. Sin embargo su puesto en el medio ya está cubierto por Esteban Pavez, que como contrapartida no puede jugar hasta la última fecha del Torneo de Apertura, donde su reemplazo es el mencionado Baeza.

Cristián Gutiérrez se perderá el duelo ante Palestino por su expulsión ante O’Higgins.

Pero la antesala tiene nombre árabe: Palestino, equipo con posibilidades solo matemáticas de ser Campeón (tendría que ganar sus 9 puntos restantes y que todos se cayeran para forzar una definición), pero que está peleando por entrar a la liguilla por un cupo a la próxima Copa Sudamericana. Y aunque el equipo no tiene lesionados (excepto los de larga data Mou Jadama y Paulo Garcés), tiene otro sancionado, que de alternativa para cumplir con el reglamento, pasó a ser fundamental: el lateral Cristián Gutiérrez, que seguramente será reemplazado por Camilo Rodríguez, que pese a jugar mayoritariamente por derecha, lo ha hecho por el otro perfil con buenos resultados.

Se acabaron los descansos y las excusas, Colo Colo tiene que salir a ganar todo.

¿Podrá Colo Colo ganar el Apertura y la Copa Chile?