Colo Colo, por primera vez este año, mejoró esta semana una de las principales falencias que los hinchas han reclamado desde hace ya bastante tiempo: La poca profundidad y el escaso recambio en el plantel del Cacique. A las ausencias obligadas de Valdés y Barroso, Tapia dio un golpe fuerte al timón, dejando fuera del equipo a Vecchio y Figueroa, quienes habían sido titulares durante el año y en el caso del “gordo”, puntal desde la llegada de “Tito” a la dirección técnica.

El fin de semana frente a Barnechea, el equipo mostró pasajes de gran fútbol, que le permitieron cerrar prontamente el partido. Sin embargo, los rivales a los que se les ganó esta semana, son los tres últimos del Campeonato de Clausura. ¿Se puede confiar en que este equipo mantendrá la impronta, en los desafíos por venir y en la Copa Libertadores?. Revisemos las distintas líneas.

En la portería, Garcés demostró que sí puede dar garantías cuando Justo Villar no puede jugar. Incluso podría poner en dificultades a Tapia al momento de tener que elegir porteros en dos torneos paralelos. Sin embargo, pese a varias buenas atajadas, incluyendo un penal, Villar sigue teniendo el favor del público, además de responder cada vez que juega, lo que demostró ayer siendo una de las figuras del equipo y pieza fundamental para cerrar el match.

En la defensa, Camilo Rodríguez fue el encargado de reemplazar a Gonzalo Fierro ante Unión Española y pese a no proyectarse en demasía, cumplía una labor destacada hasta el último minuto donde fue expulsado. Con la constante costumbre de Fierro de recibir amarilla (como ante Barnechea), es importante tener un recambio en esa zona. En el centro, es Leo Cáceres quien marca los tiempos y pese a su error en el gol del fin de semana, parece ser número puesto. Con la vuelta de Barroso, se generará un nuevo recambio con la casi segura salida de Vilches, que no juega bien como el puntal, pero responde al lado de otro. Otra alternativa que se maneja es jugar en línea de tres, lo que daría más profundidad al equipo por las bandas con Fierro y Beausejour, pero parece peligroso aventurar dicho cambio en este instante.

En el medio fue donde más cambios hubo esta semana: muchas veces hemos visto la dupla Baeza-Pavez jugar juntos, aún en los momentos más oscuros de hace algunos años, la seguridad del primero hace que el segundo se atreva a subir un poco más, donde además de convertir ante O’Higgins y Unión , da muchos pases con intención. Suazo admitió que le ha costado mucho adaptarse a este sistema de juego y como se le había visto en los partidos anteriores, echarse mucho atrás, Tapia lo hizo entrar en el lugar de Vecchio ante Unión y Barnechea. Esto resultó tanto para Suazo, como para Vecchio, quien entró picado en el segundo tiempo a demostrar su valía en ambos partidos. Difícil tarea la que se le viene a Tapia en esta línea, ya que Jaime Valdés regresaría esta semana, en la zona donde parece que mejor funciona el equipo.

Por último en la delantera, el tridente Flores-Delgado-Paredes, retomó la titularidad que tuvieron el año pasado, donde lo más relevante fue la recuperación mostrada por Juan Delgado ante Unión y que los tres delanteros marcaran ante Barnechea, al igual que Suazo, ya que estaban peleados con el arco.

En resumen, tres triunfos y tres partidos que dan para ilusionarse, pero que están lejos de la aplanadora alba del año pasado, todo esto, a un par de semanas del momento más importante de Colo Colo en los últimos años: el debut en la Libertadores contra Atlético Mineiro.

¿Qué opinas del rendimiento del equipo?

@gustalbo