• Lorenza Sciaraffia, Aporte para Cultura China
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China se tomó en serio la contaminación ambiental y todo el mundo lo aplaude, porque la verdad es que ya era hora. No solamente es el lugar más tóxico en todo el mundo; el problema llegó a tal punto que en 2016 casi un sexto del país asiático fue tapado por una nube tóxica.

Foto : Metropolitano Digital

Pero lo bueno, es que su reacción no fue mediocre. Una real “ciudad bosque” es lo que construirán en Liuzhou, en la pronvincia de Guangxi, que tiene como objetivo eliminar las 57 toneladas de tóxicos y, lo más importante, las casi 10 mil toneladas de CO2.

Foto: Stefano Boeri Architetti

Para lograrlo, la ciudad contará con nada menos que 1 millón de plantas, repartidas en más de 100 tipos de especies, y 40 mil árboles. Todas estas plantas lanzarán 900 toneladas de oxígeno limpio al año.

Stefano Boeri Architetti

Sin embargo, no solamente llenarán de árboles y plantas, también estará totalmente prohibida la circulación de vehículos contaminantes; autos eléctricos, bicicletas, y otros medios de transporte que no contaminen, serán los únicos permitidos. La movilización será solo a partir de energías renovables.

Stefano Boeri Architetti

El diseño es del arquitecto Stefano Boeri, que pensó la ciudad de tal manera, para que fuera totalmente autosuficiente. Las energías renovables más fuertes que se usarán serán la solar y geotérmica.

Tendrá una capacidad de 30 mil personas en un territorio total de 175 hectáreas, habrán dos escuelas, espacios recreativos, un hospital y, por supuesto, las áreas residenciales.

El proyecto ya está en marcha y se espera que para el 2020  esté totalmente terminado.