• Andrea Cova Moore, equipo de Facts
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Durante este miércoles las autoridades encontraron tres cuerpos en distintas zonas de la Región Metropolitana. Uno de ellos, se encontraba flotando en el río Mapocho, en la comuna de Renca, y otros dos cuerpos, descuartizados, fueron hallados en Pudahuel. La Policía de Investigaciones (PDI) se encuentra trabajando para identificar al cadáver encontrado en Renca, mientras que los de Pudahuel corresponden a una mujer y un hombre que estaban desaparecidos hace semanas.

De acuerdo con el primer Informe Nacional de Homicidios Consumados, correspondiente al período 2018-2022, este tipo de delito aumentó circunstancialmente: de 845 a 1.322 casos anuales. Un fuerte incremento que enciende las alarmas de las autoridades y entrega una realidad compleja que cuestiona las medidas de seguridad planteadas por el Gobierno. Asimismo, el estudio señala que los homicidios sin autor conocido pasaron de un 23% a un 41%. Lo que significa que estos delitos crecieron casi un 50% en los últimos cinco años, pasando de una tasa de 4,5 a 6,7 asesinatos por cada 100 mil habitantes.

En 2022 hubo 477 asesinatos más que en 2018. Sin embargo, el informe señala que a pesar del incremento de este tipo de delitos, solo el 58,4% de los crímenes tiene un responsable, lo que significa que el 41,6% de los asesinatos son casos sin resolver.

Los datos de este informe son recopilados y entregados por el Centro para la Prevención de Homicidios y Delitos Violentos, con detalles de homicidios de 2018 a 2022. Además, utiliza antecedentes entregados por ocho instituciones públicas: Carabineros de Chile, Gendarmería de Chile, Ministerio Público, Policía de Investigaciones, Servicio de Registro Civil e Identificación, Servicio Médico Legal y la Subsecretaría de la Mujer y Equidad de Género.

Dicho informe también indicó que los asesinatos ocurren mayormente en la vía pública y, según datos basados en el análisis de investigaciones realizadas por la Fiscalía, determinó que en el 28% de los casos, la motivación principal de estos delitos es por “venganza o ajuste de cuentas”.

En cuanto a las comunas del país en las que más se presentaron homicidios en 2022, destacan: Santiago en primer lugar, con 69 víctimas; Arica, con 44 casos; Valparaíso y Puente Alto, con 34; y Recoleta, con 33.

Asimismo, de las diez comunas con mayores niveles de ocurrencia de homicidios consumados, según el informe antes mencionado, seis corresponden a zonas de la Región Metropolitana: Santiago, Puente Alto, Recoleta, Colina, Estación Central y San Bernardo y las otras cuatro comunas son Arica, Valparaíso, Antofagasta y Calama.

El experto en seguridad pública y académico USACH, Jorge Araya, menciona que “las cifras de homicidio ya fueron especialmente alta el año 2022. Todos los días nos enteramos de tres nuevos homicidios en promedio (…) El ingreso del crimen organizado en Chile se consolidó, cada banda tiene su propio segmento del mercado y, en la medida que tú efectivamente aprietas o logras desbaratar algunas, se producen más luchas territoriales”.

Causas y consecuencias del aumento de asesinatos

Según explica el especialista, existe una relación con la instalación del crimen organizado en el país y el aumento de los homicidios, lo que ocasiona un incremento en la corrupción y eventual deterioro de la democracia. “Como lo han dicho distintos expertos también, cuando hay crimen organizado se dice que hay corrupción. Es decir, para que el crimen organizado pueda penetrar por los puertos y aeropuertos y embarcar mercancías, normalmente lo típico es que tiene que existir corrupciones de algún funcionario en algún lugar que está haciendo pagado o donde hay cohesión (…) Por lo tanto, el peligro no es solo el daño que produce la droga, no es solo el crimen que están produciendo, sino que van corrompiendo la sociedad a nivel de las policías, las autoridades del sistema de justicia criminal y eso es peligroso para cualquier país del mundo”, asevera Araya.

De acuerdo con Pilar Lizana, experta en seguridad e investigadora en AthenaLab, el aumento de los asesinatos se debe al crimen organizado, porque “la manera de instalarse se expresa a través de la violencia y lo que pasa es que se disputa territorio y se van generando los ajustes de cuentas y las luchas de poder”, explica Lizana. Asimismo, detalla que los casos de homicidios que se presentan hoy son diferentes: “Tienen características especiales, no son los homicidios que estábamos acostumbrados a ver en Chile que tenía una víctima y un victimario conocido (…) Lo que se está incrementando son los homicidios con víctimas o victimarios desconocidos sin relación entre ellos y eso tiene que ver con la manera en que se comporta el crimen organizado”.

Por otro lado, la experta señala que este incremento en este tipo de delito es un signo de una situación que está ocurriendo en la instalación del crimen organizado. Sin embargo, para Lizana “el crimen organizado en sí mismo no sería el problema de fondo que tiene Chile, sino que más bien el tema de Chile con respecto a la crisis de seguridad tiene que ver con algo estructural del Estado y sus debilidades que son aprovechadas por el crimen organizado”.

¿Qué ocurre con las medidas?

El Gobierno ha implementado una serie de medidas para tratar de disminuir el aumento de los asesinatos y luchar contra la delincuencia. Por ejemplo, existe el programa “Calles sin Violencia” que implica una mayor presencia policial en las distintas comunas del país, además, de medidas más efectivas que permitan una mayor eficiencia en la persecución de los delitos más violentos. Sin embargo, este plan no ha sido suficiente para frenar el aumento de este tipo de crimen.

De acuerdo con Lizana, las medidas aplicadas por el Gobierno presentan una dificultad anterior, lo que ocasiona que no se cumplan los planes para aminorar la crisis delictual. “Para que las medidas aplicadas por el Gobierno sean realmente efectivas y se mantengan en el tiempo, sean sostenibles y eficientes, necesitamos de una voluntad política real de combate contra el crimen organizado, el Gobierno debe decir: “Se acaba el crimen organizado” y debe estar comprometido con eso y realizar acciones para que eso suceda”.

Asimismo, detalla que para que las medidas efectivamente se cumplan, el Gobierno no debe enfocarse en las expresiones que tiene el crimen organizado, es decir, el aumento de los homicidios, situaciones de extorsión, secuestro o narcotráfico, porque no están abordando el problema de fondo. Esto, “es un problema estructural que tiene que ver con el funcionamiento del Estado, que en su conjunto debe generar medidas y sinergias para que las acciones particulares sean eficientes”, manifiesta la experta.

Eduardo Labarca, Prefecto (R ) de la Policía de Investigaciones menciona que en cuanto a las medidas que ha implementado el Gobierno, que “siempre son buenas, siempre hacer algo va a ser bueno. Claramente, quizás si no se cumple o no se están cumpliendo, puede tener multicausales, pero aquí lo importante es que se haga algo y que se lleve a cabo y que no sean voladores de luces, o simplemente, saludos a la bandera”.