La película “Poltergeist”, dirigida por Tobe Hooper y producida por Steven Spielberg, es considerada una de las mejores películas de terror sobrenatural de la historia, aunque también llamaría la atención por varios elementos inquietantes.

En la cinta de 1982, que narraba las vicisitudes paranormales que experimentaba una familia de California tras irse a vivir a unos modernos suburbios construidos sobre un sitio embrujado, junto a los pósteres de “Alien” y “Star Wars” que aparecen en una pared de la habitación de los personajes de los pequeños hermanos Robbie y Carol Anne Freeling, aparece un póster del Super Bowl de 1988, evento deportivo en ese momento se celebraría dentro de seis años.

Lo insólito del caso, aunque algunos sólo lo tachan de coincidencia, es que el Super Bowl XXII se jugó el 31 de enero de 1988, seis años después del estreno de “Poltergeist”, el mismo día en que la niña estrella de la franquicia, Heather O’Rourke (quien interpretó a Carol Anne, la niñita rubia de cinco años que decía la famosa frase “ya están aquí”), enfermó gravemente.

Ese día, la actriz infantil, que en 1988 ya tenía 12 años de edad, comenzó a vomitar y se desmayó. Camino al hospital, sufrió un paro cardíaco causado por un shock séptico debido a una estenosis intestinal, falleciendo ese mismo día en el Hospital Infantil Rady de San Diego, California.

Algunos fans creen que el poster del Super Bowl, que pareció predecir de alguna manera la trágica y prematura muerte de Heather O’Rourke, estaba relacionado con la llamada “Maldición de Poltergeist”, supuesto sortilegio trágico que rodeó a la película y que también incluyó la muerte de un tramoyista cuando cayó una luz durante el rodaje de la cinta, además del asesinato de Dominic Dunne, la actriz que interpretó a la hermana mayor del personaje de Carrie Anne, y quien fuera estrangulada por su novio en 1982 en la vida real.