Selena Gomez: Pasó de aparecer en “Barney y sus amigos” y “Los hechiceros de Waverly Place” a apostar por la música. Claramente, fue un acierto.

Taylor Momsen: Entre sus trabajos más famosos se encuentran los papeles de Cindy Lou en la película “El Grinch” y de Jenny Humphrey en la serie “Chica indiscreta”. Luego, dejó la actuación por el rock pesado, por su banda The Pretty Reckless.

Kylie Minogue: Tuvo los primeros atisbos de popularidad gracias a la telenovela Neighbours. Luego, dejó las pantallas para triunfar en la música. En el 2020 Can’t Get You Out of My Head ocupó el puesto 17 en el ranking de las 100 mejores canciones.

Jared Leto: Actor que conquistó un Óscar y un Globo de Oro. Luego, se abrió paso en la música con su grupo 30 Seconds to Mars, el cual fundó junto a su hermano.

Miley Cyrus: Reconocida mundialmente por la serie de televisión juvenil Hannah Montana, en el 2007 cambió las pantallas por los micrófonos y tuvo éxito rotundo. Es uno de los mejores ejemplos de los niños actores que se convirtieron en estrellas de la música.

Sofía Coppola: El papel de Mary Corleone en El Padrino puso fin a su carrera. La crítica fue muy dura con su incipiente recorrido por lo que decidió cambiar de vereda su sumarse a la dirección de cine, logrando destacar con obras maestras como María Antonieta, Perdidos en Tokio y Elite Society.

Adam Lambert: Desde chico ganó reconocimiento por papeles en musicales famosos. Pero, su gusto por la música fue mayor y una excelente participación en American Idol lo catapultó a ligas mayores.

Cameron Diaz: Una actriz que logró estar en lo más alto del cine, pero también ácidas críticas. Fue por esto último que tras 27 años de carrera decidió dejar el cine para dedicarse a escribir libros, logrando una colaboración con Sandra Bark en “The Body Book” que logró ocupar el segundo puesto de los libros más vendidos según el New York Times.

Meghan Markle: Apareció en la serie “General Hospital” y “Suite”, siendo esta última historia con la que alcanzó mayor éxito. Lo anterior, hasta que su boda con el Príncipe Harry hizo que se alejara de las pantallas.

Mary-Kate y Ashley Olsen: Tuvieron éxito con la serie “Tres por tres”, pero el reconocimiento llegó con la película “It takes two”. En el 2004 abandonaron la industria del cine para dedicarse a la moda.

Quentin Tarantino: Después de experiencias fallidas como actor se dio cuenta de que su camino debía ir por otro lado. Y sí, su norte estaba en la dirección de películas, donde se transformó en uno de los profesionales más destacados.

Demi Lovato: En el 2006 participó hasta en la serie “Prisión Break”. Además de películas de Disney. No obstante, en el 2008 impulsó su carrera musical y logró alcanzar una fama que es una realidad hasta el día de hoy.

Lady Gaga: Desde joven dio pasos en el teatro amateur. También, estudió en el Instituto de Cine durante varios años. Sin embargo, en el 2005 tomó la decisión de abandonar la universidad y probar suerte en la música, su pasión. Una serie de premios confirman que la estrella acertó completamente.