Los cuartos de final de la Copa Sudamericana están programados para el 17 de septiembre. Alianza Lima espera por la determinación de la Conmebol, para saber si jugará contra Independiente o Universidad de Chile.

El partido fue cancelado debido a los incidentes provocados por ambas barras. Pese a que el presidente del cuadro de Avellaneda, Néstor Grindetti, expuso en la Conmebol este jueves para pedir los puntos, hay un documento que podría ser clave en la decisión final.

Así lo dio a conocer el medio argentino “Doble Amarilla”. “Durante la reunión previa se planteó la conveniencia de que no hubiera público en la tribuna inferior; sin embargo, se informó que esa localidad ya se encontraba vendida”.

Junto a esto, se dio a conocer que “como medida preventiva, se dispuso que en la tribuna visitante se ubique personal de la Policía y seguridad privada con el fin de evitar que los hinchas visitantes arrojen elementos o generen algún tipo de desorden contra el público local”.

Precisamente este punto fue el que no se cumplió, desembocando en la batahola. “Los disturbios dentro del estadio pusieron en evidencia que el despliegue no fue suficiente para contener la violencia una vez iniciado el partido”, dijeron desde La Nación.

Finalmente, un especialista le dijo al diario trasandino que “la conexión entre tribunas fue abierta desde adentro y la llave pertenece al club. Eso deja interrogantes sobre la responsabilidad institucional en los hechos. Tampoco se dispusieron pulmones de contención entre ambas hinchadas, lo que facilitó la proximidad y el posterior enfrentamiento”.