Una discusión que viene a la mente cada vez que se habla de dinero es aquella que cuestiona si es precisamente el poder adquisitivo el que genera la felicidad. No obstante, hay otros que intentando adaptar esa conveniente relación aseguran que, al menos, la riqueza ayuda a financiar la felicidad, lo que ya es bastante.

Sin embargo, a la luz de algunas investigaciones científicas, ha surgido un poderoso contrincante en esa afanosa búsqueda de producir felicidad. Uno mucho más importante y que sería mucho más eficiente a la hora de ser feliz: el sexo.

Sí, porque un estudio elaborado por investigadores de la Universidad de Toronto – Mississauga (Canadá) asegura que tener sexo provoca mucha más felicidad en las personas que el dinero.

Tal hipótesis se apoya en otros tres estudios que se realizaron, los cuales involucraron unos 30 mil casos de parejas investigadas.

La primera parte de la investigación, es decir, el primer ensayo permitió plantear que practicar sexo una vez por semana es una condición esencial para que las personas puedan ser más felices. Pese a ello, ese primer estudio arrojó que tener más relaciones sexuales por semana no incrementa esos índices.

Continuando con el segundo estudio, la conclusión comprobada es que la felicidad provocada por el sexo estaba asociada a una creciente liberación de hormonas, las cuales reducían considerablemente el nivel de estrés y ansiedad de las personas estudiadas.

Y coincidentemente con el primer estudio, en esta oportunidad también se comprobó que tener mayor cantidad de sexo no incrementaba la sensación de tener felicidad, porque no generaba más liberación de hormonas.

Para finalizar, el tercer estudio cruzó los datos y constató que si existía una relación directa entre la felicidad, el dinero y el sexo, estableciendo cómo afectaba el tener o no tener dinero en la vida cotidiana a las parejas estables que tuvieran relaciones sexuales.

Y como conclusión de todo el estudio, se pudo constatar científicamente que aquellas parejas que cumplían con la regla del estudio, es decir, tener sexo por lo menos una vez por semana, eran más felices que las que tenían mayor poder adquisitivo.