• Eduardo Retamal, ex Guía de Universidad de Chile
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A tan solo ocho fechas de llegar a la mitad de la temporada 2013-2014 comienzan a perfilarse los grupos de avanzada, al que la U lucha por alcanzar, y el grupo de equipos comprometidos con el descenso por su bajo rendimiento. En este último caso se encuentra el histórico rival del chuncho, el cacique.

Las bases del torneo Petrobras, respecto del descenso en su artículo 101 señalan: “Finalizados los torneos de apertura y clausura, los clubes que se ubiquen en las posiciones 17ª y 18ª de la tabla de cómputo general de las fases regulares de los Torneos de Apertura y Clausura de la Temporada 2013-2014, descenderán en forma automática a la Primera B y ascenderán dos clubes de Primera B a Primera División. Los ascensos y descensos se harán efectivos a partir de la temporada siguiente a aquella en que se produjeron.”.

Colo Colo con nueve fechas jugadas continúa cayendo en la tabla de posiciones y se encuentra en el puesto 16°, con sólo dos triunfos, una diferencia de -4 y un 25,9% de rendimiento.

En 1988 la U en su descenso, ganó solamente siete de los treinta partidos del año, tuvo una diferencia de -8, que le significó ocupar el puesto 17° y quedar detrás O’Higgins y Unión Española por un gol de diferencia, con un 28,8% de rendimiento haciendo la conversión correspondiente pues en aquellos años el triunfo otorgaba solamente dos puntos.

Es cierto que faltan veinticinco fechas para el final de esta temporada anual 2013-2014, pero el rendimiento del cacique es cada vez más preocupante para sus hinchas, pues su equipo no despega y sus ultra promocionadas contrataciones y figuras no mejoran su rendimiento y cada partido es una penuria alba por estos tiempos. El fantasma del descenso va tomando Maratón hacia el sur rumbo a Macul.

En las bancas de ambos equipos hay nombres importantes: en la U el ultrafamoso Manuel Pellegrini, quien hoy tiene una partida falsa con el Manchester City tanto en la Liga, con derrotas con equipos modestos, y perdiendo ampliamente con el Bayern Munich de Guardiola como local, seguramente hoy el ex zaguero no dejaría a los citizens un par de semanas a cargo de su ayudante para hacer un cursillo de técnicos en Italia.

En el cacique el antaño exitoso Gustavo Benítez, quien luego de su glorioso pasado campeón con el albo en los años noventa no ha podido reverdecer laureles pese a la expectativa generada por medios deportivos y periodistas de la bancada alba.

En el arco de la U jugaron primero el recordado Raúl ‘mormón’ Díaz (9) y completó la temporada Héctor Giorgetti (21). El arco del cacique tiene una garantía mucho mayor como el internacional y mundialista paraguayo Justo Villar, quién la está pasando bastante mal por estos días.

La defensa de la U ’88 conformada recurrentemente en línea de cuatro por Pepe Díaz, Héctor ‘el negro’ Díaz, Horacio “car’e pato’ Rivas y Roberto Reynero sorprendentemente fue la sexta defensa menos batida ese año con 34 tantos en treinta partidos, sin ser brillante daba ciertas garantías y hpodría decirse que cumplió recibiendo siete y nueve goles menos que los equipos que se salvaron, pero el descenso es lapidario y no se salva nadie.

Este año en el cacique Fuenzalida, Vilches, el multicampeón suplente Mena y Craviotto hasta ahora dan muy pocas garantías, especialmente cuando juegan con amplios espacios a sus espaldas.

En la zona de volantes a fines de los ochenta en el año del descenso actuaban mayoritariamente el porteño Jorge Pérez, Lucho Musrri, Marcelo Silva, el zurdo Alejandro Rojas y Luis Rodriguez quienes no lograron alimentar bien a su débil ofensiva que apenas convirtió 26 goles, menos de un gol por partido.

En el cacique jugadores consagrados como Fierro y Vecchio, junto a Benítez, Jason Silva y Pavez no logran dar con el equilibrio y gravitación del albo.

La delantera de la U ’88, llena de situaciones de gol perdidas y escaso peso ofensivo comandada por Héctor Hoffens, Valdir Pereira, Cristián Olguin, Alvaro Vergara y Raúl Toro.

En el cacique se amontonan nombres que están nublados con el arco pero que de pronto lo encuentran dentro de un discreto rendimiento: Flores, Olivi, Toledo, el choro Emilio y Canales, hacen sufrir cada fin de semana a la hinchada alba.

Queda campeonato y el cacique tiene la palabra: ¿le empatará el récord a la U con su primer descenso?