• Eduardo Retamal, ex Guía de Universidad de Chile
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Escasa suerte tuvo la U y particularmente su técnico Angel Guillermo Hoyos en el sorteo de la Copa Sudamericana de este año, pues deberá cruzarse nada menos que con el equipo más popular de Sao Paulo y uno de los grandes de Brasil como es el Corinthians.

Los paulistas vienen de cumplir una decepcionante campaña en el Brasileirao y esperan de la mano de su técnico Fabio Carille levantar el rumbo e intentar volver a los grandes logros de hace pocos años atrás cuando ganaron la Copa Libertadores de América (2012) y la Copa Mundial de Clubes (2000 y 2012). El actual séptimo lugar en la liga brasileña es el que permite a “O Timao” participar en la Sudamericana, en su nuevo formato que comienza con 22 cruces, como consuelo a no poder hacerlo en la Libertadores.

Los paulistas se caracterizan por tener un juego sólido y tener mucha potencia física pero no es un equipo imbatible pues en el último torneo cayeron una docena de veces lo que para un equipo con aspiraciones habla de situaciones comunes con las que ha vivido la U y también de tener una defensa vulnerable. Entre sus figuras destacan uno de los talentosos mellizos paraguayos Romero (Angel), el arquero Cassio, otros dos jóvenes guaraníes y el colombiano Mendoza otrora seleccionado sub 20.

Corinthians no aparece hoy como una fuerza futbolística incontenible para la U, si un gran nombre y estadio a visitar, pero el momento del club paulista llama a pensar que esta confrontación, la que se cierra en Santiago, incluso puede ser equilibrada y con chances para la U.

Lo anterior siempre y cuando, una vez más lo decimos, se hagan los deberes, se planifique extremadamente bien el partido, los jugadores lleguen muy bien preparados físicamente y que dentro de estas semanas aparezca el equipo que el hincha ya lleva extrañando muchísimo tiempo.

Hasta ahora la U no ha mostrado mucho en su pretemporada, así que la palabra la tiene el técnico Hoyos que cuenta con un plantel abundante y tiene la oportunidad de revalorizarlo ahora en la única chance internacional de la U para este año, frente a Corinthians, nada menos, un equipo en cuyo staff de futbol profesional no falta absolutamente nada.