• Gustavo Dávila, ex guía de Lucha Libre
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Así como hace un par de semanas, SmackDown había tenido un debut bastante interesante en su PPV exclusivo Backlash, se esperaba que RAW respondiera a la altura. Sin embargo, el esperado retorno del concepto de Clash of Champions, pareció quedarse un poco corto, principalmente por la falta de sorpresa de sus resultados, que dejaron el desarrollo de la marca, en un punto muerto.

Revisemos los combates.

Kick-off: Nia Jax venció a Alicia Fox. Poco a poco los kickoff se iban abriendo a la posibilidad de ver nuevos talentos y feudos en ciernes que merecían ser destacados. Pero avanzada la programación, vimos que el combate femenino propuesto, además no tener una gran historia, tendría muy poco tiempo para desarrollarse. Jax se ha establecido como una nueva femina destructora, pero tal vez su ascensión al plantel principal, fue demasiado prematura para pensar en ella como la nueva Chyna o Beth Phoenix. Muy poco para poder hablar de este combate.

The New Day vencieron a Luke Gallows y Karl Anderson reteniendo el Campeonato en Parejas de RAW. Hace 400 días, cuando los New Day se hicieron acreedores por segunda vez del Campeonato en Parejas de la WWE, lo cierto es que la División se encontraba en crisis y su presencia con los cinturones, marcaba precisamente la falta de desarrollo creativo para un trofeo que había tenido mucha más presencia en el pasado. Hoy podemos decir que paso a paso la División se ha ido consolidando y aunque la División de marcas trajo como principal problema la falta de retadores competitivos en RAW, los Campeones gozan de buena salud, hoy como parte de los favoritos del público y con tranco firme a superar a Demolition como el reinado más largo de la historia de los Campeonatos en Pareja. Combate correcto con posibilidades para los retadores pero que los campeones pudieron resolver.

T.J. Perkins venció a Brian Kendrik reteniendo el Campeonato Crucero de la WWE. Interesante propuesta la remozada División Crucero de la WWE, ya que en su anterior época, reunía a los mismos luchadores que estaban en los feudos principales alrededor de un Campeonato que no era el objetivo primario. Hoy junto con ser un semillero para la WWE, el Campeonato parece ser el objetivo primario de esta camada de luchadores independientes, cuyo sueño era llegar al top de sus carreras.  Si bien Kendrik no cumplía con el prototipo de pertenecer a una nueva generación, fue una buena elección para levantar a un muchacho poco conocido en el primer nivel, pero con técnicas propias de un crucero de raza. Buen momento de una División que podría tomar un protagonismo insospechado.

Cesaro y Sheamus terminaron sin resultado en la final de la serie al mejor de siete. El mejor combate de la noche, terminó en la confusión por una decisión que podría haber sido muy acertada, pero que al final se perdió en el enredo con que quedó el público. Siempre Cesaro ha sido visto como el posible Campeón de un futuro que cada vez se ve más lejano, alcanzado por las nuevas generaciones que se desarrollan cada vez más pronto y Sheamus en lo que parece un largo ocaso de su impresionante llegada a la WWE como Campeón casi inmediato, chocaron en lo que fue una más que atrayente posibilidad de ver a ambos con el Cinturón máximo. La decisión de terminar la serie sin resultado y la aún más discutible opción de ponerlos como pareja, diluyó lo que hasta ahora era un clásico que podría marcar época para ambas estrellas. Mal final para una gran serie y combate, el mejor de la noche.

Chris Jericho venció a Sami Zayn. Dos estrellas top de la marca, que se involucran en un combate donde no hay claridad de su historia (no era por luchar por la amistad de Owens, que era lo único claro, ni por el insulto de Zayn al legado de Jericho), se pierden en definitiva por el poco tiempo que hubo para desarrollar el concepto y por el sorpresivo ganador. Jericho más que nunca se ha encargado de amoldar y levantar nuevas estrellas, por lo que su triunfo ante Zayn, aunque apreciado por su larga lista de fanáticos, diluye las espectativas claras de aprovechar el background de Zayn para ponerlo en frente de Owens en el futuro próximo. La única hipótesis es que la WWE busca poner a Zayn en el lugar del underdog, pero pese al apoyo popular, es difícil que pueda llegar a un nivel como el alcanzado por Daniel Bryan en su oportunidad por ejemplo. Innecesario cruce de figuras, que no dejó nada en el historial de ninguno de los dos.

Charlotte venció a Sasha Banks y Bayley reteniendo el Campeonato Femenino de RAW. Pese al gran combate que produjeron las chicas provenientes desde NXT y conocidas como las Four Horsewomen (donde solo faltó Becky Lynch por estar en SmackDown), el factor sorpresa cada vez se diluye más en la cada vez más palpable aspiración de la WWE de dotar a Charlotte de una superioridad sin límites sobre las otras chicas, que dado su arrastre merecen también largamente una oportunidad mayor con el cinturón femenino. Bayley recién comienza este largo camino por lo que su posición como retadora está justificada, aunque aun no se vislumbre como campeona. Sasha por su parte se ve un poco frustrada por su corto reinado como campeona, pero podría darse una posibilidad de verla frente a la Campeona en una inusitada Hell in a Cell femenina (de nada por la idea WWE). Excelente técnica por parte de las tres mujeres, esperemos mayor rotación en un Título que tiene por donde sostenerse pese a eso.

Roman Reigns venció a Rusev ganando el Campeonato de los Estados Unidos. Que la WWE quiere que Roman Reigns sea el John Cena de la próxima generación, parece ser un secreto a voces, pero que lo ponga contra el mismo rival que Cena tuvo hace poco más de un año y por el mismo título, parece ser demasiado. Si bien ahora el enfrentamiento de Reigns contra Rusev tuvo mucho más que ver con su matrimonio con Lana, que con su constante significado anti-nacionalista, lo cierto es que existe un gran mérito en el luchador búlgaro: permitió a Reigns recuperar algo de ese arrastre popular que tenía al salir de su histórica agrupación y la gente percibió como positiva su posición como Campeón. Combate interesante donde Reigns se alzó con su premio de consuelo luego de su suspensión. Habrá que ver como la WWE maneja este reinado que resulta muy importante en su condición de segundo título en importancia.

Kevin Owens venció a Seth Rollins reteniendo el Campeonato Universal de la WWE. Constantemente se reclama una mayor rotación y posibilidades a nuevas figuras en los eventos principales de ambas marcas. Sin embargo lo que pareció una lección muy bien aprendida en Summerslam con Finn Bálor se cayó a pedazos inmediatamente con su lesión. La oportunidad quedó dando botecitos para Kevin Owens, quien hasta ahora muestra tener las aptitudes para ser el Campeón, pero parece inmerso en una isla sin claridad de un posible próximo rival. Aunque la lesión de Rollins luego de este combate parece no ser de cuidado, lo cierto es que una nueva oportunidad por el Título parece exagerada por el momento, a la espera del seguro enfrentamiento que tendrá contra Triple H, el que lo más probable no se de antes del próximo Wrestlemania. La pregunta entonces más recurrente ahora con el nuevo status de Reigns es ¿Quién podrá detener a Kevin Owens?. Interesante defensa con factores externos que seguramente darán que hablar a futuro.

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@gustalbo