Un problema no menor es el que se vive en Valparaíso hace casi una semana, luego de que una pitón se fugara del edificio residencial Geopark, en las cercanías del hospital Carlos Van Buren.

Vecinos acusaron que los dueños del animal, al que tenían como mascota, no dieron aviso oportunamente a las autoridades, pues se habría escapado el pasado sábado.

Funcionarios del Servicio Agrícola Ganadero (SAG) llegaron hasta el lugar para recabar información, y luego la entidad comunicó que “el SAG de la región se mantiene en contacto con personal del edificio y seguirá realizando el correspondiente seguimiento y volverán a visitar mañana el lugar para continuar con la búsqueda”.

Por parte de la administración del recinto, indicaron que la única persona responsable de atraparla es quien la tenía al interior de su departamento, pese a que el resto de los residentes habían alertado la situación.

Según le indicó a Radio Biobío Carla Salazar, una de las vecinas, “por intermedio del chat del edificio, una integrante del comité nuevo nos informó que estaba perdida una pitón, más o menos grande, y que cerráramos ventanas y puertas y que revisáramos lugares donde podía estar escondida”.

Al mismo medio, el veterinario y vicepresidente de Fundación Ñamku, Pablo Salah, le comentó que “dependiendo del tamaño podría ser un riesgo para la población. Tienen una característica bien especial, que son constrictoras, se enrollan en la víctima. No son venenosas, pero si no están esterilizadas tienen una mayor tasa de reproducción.