El Santo Sudario de Turín, el trozo de tela que supuestamente cubrió el cuerpo de Jesucristo después de su muerte en la cruz, es considerada la reliquia más valiosa y antigua del cristianismo. Y también, gracias a la increíble imagen tridimensional estampada en la tela, que muestra a un hombre martirizado y cubierto con las mismas heridas que según la Biblia sufrió el Hijo de Dios (incluyendo la herida causada por una lanza en su costado), ha sido llamada como el “Quinto Evangelio”, debido a la gran información que contiene sobre la Pasión del Señor.

Hace un tiempo, tomando como base el rostro del hombre de barba y cabellos largos que aparece estampado en la Sábana Santa de Turín, la policía italiana, aplicando las mismas técnicas informáticas que se utilizan para actualizar las imágenes de los mafiosos y otros criminales buscados y de los que sólo se tienen algunas fotos antiguas (tal como ocurrió con el mafioso Bernardo Provenzano, quien fue capturado finalmente en 2006 y cuya última fotografía conocida databa de 1959), realizó el proceso invertido para elaborar la imagen del que sería Jesús de niño, a partir del negativo de la imagen facial estampada en la llamada Sábana Santa.

De ese modo, a partir del sereno y digno rostro estampado en el Santo Sudario de Turín, que muestra a un hombre fallecido con los ojos cerrados, nariz larga y fina, labios finos, ojos grandes y hundidos, y barba y cabellos largos y abundantes con un peinado con raya en medio, se logró dar con la imagen facial que supuestamente tenía Jesucristo cuando era un niño de 10 años.

Para lograr esto los técnicos invirtieron informáticamente el proceso de envejecimiento del rostro estampado en la Sábana Santa, reduciendo el tamaño de la mandíbula, levantando la barbilla y enderezando la nariz de la imagen facial. De ese modo, se consiguió el rostro de un Jesús niño de unos 10 años, de piel morena, pelo rizado y castaño claro, nariz alargada y labios finos, que según la policía italiana sería así como el “retrato informático” de un Jesús de niño.