• Jimena Villegas, ex Guía de Música Pop
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Foto: El Mercurio

Shakira, convertida en la cantante latina más poderosa del mundo, está en medio de un extenso tour con fechas confirmadas hasta junio.

Si hay una unión virtuosa en el arte de crear a un ídolo pop ésa es talento + convicción. Y si hay alguien que encarne bien esa unión, que junta aquello que la naturaleza da con aquello que la experiencia enseña, ésa es Shakira Isabel Mebarak Ripoll, la cantante pop latina más poderosa del mundo.

Nacida  el 2 de febrero de 1977 en Barranquilla (Colombia), la artista mejor conocida como Shakira a secas, junta en ya dos décadas de experiencia artística una impresionante cantidad de hitos. El primero, sin duda, es lo extenso de una carrera que, dando fe de empuje y actitud, comenzó a la edad de 13 años. Según dan cuenta sus biografías difuminadas por la red, Shakira es, además de cantante, compositora, productora musical, bailarina y filántropa. En seguida el registro en números:

Su segundo disco, “¿Dónde están los ladrones?, vendió 10 millones de copias en 1998 (una época en que los músicos aún podían hacerse ricos sólo pasando por el estudio de grabación y sin tener que poner un pie en la calle), pero no fue el más exitoso: Shakira pudo más.

Su primer intento crossover, que la impulsó a lanzar su primer álbum en inglés,  fue el del gran boom. Se llamó “Laundry service”, de 2001, cosechó 15 millones de copias gracias a una excelente campaña de promoción que tuvo en el  single “Whenever, wherever” y puso a Shakira en la verdadera órbita del pop estelar, la anglosajona. Digamos que la transformó en una artista de clase mundial.

Hasta ahora Shakira ha ganado 2 premios Grammy, 7 Grammy latinos, 12 premios Billboard latinos y ha sido nominada a los Globos de Oro. Es la artista colombiana más vendida de la historia. Y en fama y millones, del mundo latino, sólo la supera Gloria Estefan, quien le lleva origen de ventaja: siendo cubana de nacimiento, es en realidad una artista de escuela norteamericana, pues forma parte del poderoso mundo musical de Miami y cuenta con el apoyo de su marido Emilio, quizá el latino más influyente de la industria musical estadounidense.

Foto: El Mercurio

Shakira saludando a sus fans en Hotel Ritz de Santiago. Aquí su show, que promociona el disco "Sale el sol", formaba parte de un encuentro llamado "The pop festival".

Hoy Shakira está de promoción: presenta en vivo su último disco, otro intento bilingue: “Sale el Sol”, lanzado en octubre de 2010 y que ha cosechado críticas tibias. Se trata de todos modos de un tour hecho a la medida para una artista de su envergadura: es extenso e internacional. Partió el 1 de marzo en Salta (Argentina), pasa también por Santiago -hoy en el Estadio Nacional- y la mantendrá en “la carretera” al menos hasta el 14 de junio, cuando se presente por segunda vez en París.

Aquí, el contexto es curioso: su show forma parte de un concierto macro. Shakira es la invitada de honor de una cita organizada por ella misma, bautizada como “The pop festival” y en la que aparece arropada por Vicentico, Ziggy Marley, los norteamericanos Train y la chilena Francisca Valenzuela.

Del menú de Shakira se pueden decir un par de cosas. Una es que contiene “Waka waka (esto es África)”, el single que caracterizó el Mundial de Fútbol de Sudáfrica y que, por lo mismo, sirvió de sello para su fama: si, a principios de 2010, alguien en el mundo no conocía a Shakira, ese single, repetido hasta el cansancio durante la cita mundialista y que la tuvo en escena para los festejos de presentación, se encargó de presentársela. Otra es que, en efecto como apuntan sus detractores, es un álbum irregular: tributa tanto a su propia capacidad de hacer baladas inolvidables, como sigue la línea folk de artistas del estilo Alanis Morissette en el sencillo que da nombre al disco o la lleva a explorar en uno de los ritmos de moda, el reggaeton, donde comparte crédito con El Cata (“Loca”) o con alguien que no se declara reggaetonero, sino músico: Residente, de Calle 13, en el single “Gordita”.

Foto: El Mercurio

Su romance con Piqué, 10 años menor que ella, también es parte de su leyenda pop.

Y sí, puede que éste no sea el mejor trabajo de Shakira, pero da cuenta de quien es ella: puro poder, pura actitud, una máquina al servicio del pop, lo suficientemente arrolladora como para dar vida con una mano a un álbum de excelente producción, mientras dedica la otra a hacer obras de caridad, reunirse con políticos, abogar por la paz y exigir que no indaguen por su vida privada aunque preguntar no sea necesario, porque igual sabemos que Antonio de la Rúa ha dejado de ser su novio y que Shakira tiene nuevo amor: ni más ni menos que la estrella del fútbol español Gerard Piqué, con quien ella se da una repasada por otra moda pop, la de las “cougars”, esas diosas que hartas de los vejestorios de su edad eligen a tipos unos cuantos años menores, en este caso 10. Maestra.