• Alberto Stephens, ex Guía de Realeza
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Meghan Markle ha dejado de lado la tradición británica para algunos asuntos personales.

La relación entre Meghan Markle y la Reina Isabel ha tenido muchos altos y bajos, y en las últimas semanas un par de situaciones añadieron más tensión a la Familia Real.

Primero, la monarca de Inglaterra le prohibió a la Duquesa de Sussex utilizar las joyas de la colección real, principalmente las que pertenecían a la fallecida Princesa Diana.

Días más tarde, la ex actriz de “Suits” respondió contratando su propio equipo médico y rechazando los doctores recomendados por la Reina para el nacimiento de su bebé en las próximas semanas.

Sin embargo, hay un tema mucho más sensible y que puede provocar el quiebre definitivo entre las dos, de acuerdo a lo revelado por Katie Nicholls en un libro, según informó el Daily Mirror.

Teresa May ha tenido muchísimos inconvenientes con el “Brexit”.

Muy cercana a la realeza del Reino Unido, la escritora dijo en “Harry: vida, pérdida y amor” que la señora del Duque de Sussex no puede hablar bajo ninguna circunstancia de política.

En ocasiones anteriores, Markle ha dado a conocer abiertamente su postura respecto a la igualdad de género, el feminismo y la justicia social, llegando a criticar a Donald Trump cuando ganó las elecciones en Estados Unidos en 2016.

Pero en Inglaterra su situación es diametralmente opuesta, dado que Isabel tiene prohibido votar al ser Jefa de Estado y siempre ha mantenido reservada su mirada política, pese a que se reúne semanalmente con la Primera Ministra Teresa May.

Nicholls explicó por qué la norteamericana está vetada para referirse a los problemas políticos en ese país. “La Reina es neutral y espera que su familia haga lo mismo. Si llega a decir algo relacionado a la política, va a generar un inconveniente muy grande”, aseguró.