“November Rain” es un obra maestra. Seamos francos, si Beethoven y Mozart hubieran vivido en 1991, hubieran recelado a Axl Rose y Slash por haber compuesto eso maravilla. Pero la creación artística y el boom comercial no van necesariamente de la mano y, suele ocurrir, tiene que haber habido más ingredientes para que el segundo ocurriera.

“Lluvia de noviembre” es una maravilla de canción, una excelente vara en producción, una ejecución espectacular, una grabación como ningún otra… y un videoclip emocionante. Es decir, la industria musical de los 80s (1991 pertenece a los 80s, musicalmente hablando) había alcanzado tal nivel que todo aquello se hizo con los mayores estándares de calidad. Historias narradas casi en términos de cine, solos de guitarras únicos, modelos y rockers enamorados dentro y fuera de la pantalla, todo conjugaba en piezas perfectas.

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¿Hay mérito en el genio detallista y evolutivo de Axl Rose por sobre el talento innato rocker de Slash? Puede ser. No vamos a entrar en esa. Lo cierto es que “November Rain” videoclip, que obviamente incluye la canción, alcanzo un superecord, que devuelve a la banda a su lugar de leyenda que ocupa desde hace más de treinta años.

El tema superó los dos mil millones de reproducciones en Youtube. El número es más propio de los nuevos géneros musicales que del rock. ¿Miran los chicos videos de rock o se trata de los dinosaurios que vuelven una y otra vez a las grandes obras musicales de los 80s?