Kaley Cuoco pudo haber perdido una pierna al caer de un caballo / www.elle.com

Justo cuando Kaley Cuoco confirmó su embarazo, por lo que espera una niña -su primer hijo- junto a Tom Pelphrey, llegó un recuerdo no muy feliz que digamos.

Las situaciones no guardan relación entre sí, si bien se dieron a conocer casi al mismo tiempo. Y es que acaba de lanzarse “The Big Bang Theory: The Definitive, Inside Story of the Epic Hit Series”, libro basado en la sitcom emitida entre 2007 y 2019.

Previamente, habíamos compartido un fragmento en el que Cuoco se refirió detalladamente al pololeo que mantuvo con Johnny Galecki. Y ahora, hay un nuevo episodio salió a la luz. También sobre la actriz, pero narrado por Chuck Lorre.

Y es que, en 2010, decidió montar un caballo en un rancho de Los Ángeles, hasta que cayó. Con tanta mala suerte, que el animal también hizo lo propio, pero sobre la pierna izquieda de la artista. Kaley debió ser trasladada a un hospital con lesiones graves.

El creador de “The Big Bang Theory” aseguró sin dudarlo que “ese fue el momento más oscuro y aterrador de los 12 años de la serie”, aun cuando no sucedió en la ficción… sino en la vida real. La actriz estadounidense salvó su pierna gracias a un milagro.

El profesional que trabajó en la pierna de Cuoco fue Stephen Lombardo (del departamento de Medicina Deportiva de Cedars-Sinai), y Lorre dijo que “fue milagrosao que me encontrara con el doctor Steve. Cada vez que lo veo, le digo ¡gracias! ¡Has salvado a Kaley! y en un nivel menor ¡gracias! ¡Has salvado a The Big Bang Theory!”.

Un compañero de elenco de la intérprete, también protagonista de “The Flight Attendant” (por la que fue nominada al premio Emmy), aseguró con evidente dramatismo que “estaban hablando de amputarle la pierna, fue devastador”.

De hecho, previo a la intervención de Lombardo, los médicos estaban seguros de que no podría volver a caminar, por lo menos temporalmente. Gracias al mencionado doctor y con la ayuda de una bota, todo se solucionó de la mejor manera.

La propia Cuoco recordó a la revista People el feo ingreso a la clínica: “Antes de entrar al quirófano, me hicieron firmar un formulario que decía que ‘no sabremos el resultado hasta que entremos y veamos la pierna. Podríamos salir sin ella’”.