Inicio » Tenis » Equipo

Detrás de las escenas en las Finales Challenger

En Sao Paulo se realizó la primera versión del Masters de los Challenger, donde los siete mejores con un invitado cierran el año en ese tipo de torneos. Mostramos una mirada personal al evento.

La ATP está decidida a impulsar los torneos Challenger y para ello creó este años las Finales ATP Challenger Tour, el Masters de ese tipo de certámenes, donde compitieron los siete mejores del año más un invitado especial, y cuya sede fue la populosa ciudad de Sao Paulo en Brasil.

El motivo del porqué se hizo el evento en Sudamérica tuvo que ver con el aprovechamiento del impulso que va tomando Brasil con la cercanía del Mundial de Fútbol 2014 y los Juegos Olímpicos 2016, además de promover más la actividad en esta parte del mundo que por lo general es un actor secundario del deporte blanco.

Así la imponente Sao Paulo recibió con honores el torneo, en una ciudad que refleja su enorme crecimiento y gran congestión casi a toda hora del día por sus principales calles; por suerte para los jugadores el hotel oficial sólo quedaba a 10 minutos del Gimnasio Ibirapuera, y el entorno de ambos lugares estaba rodeado por pequeños oasis de áreas verdes y parques hermosos que ponen una escena irreal en una ciudad netamente urbana.

Partido Challenger

Foto: Jorge Ducci

La cancha dura donde se disputaron las Finales ATP Challenger Tour.

El escaso sol y clima fresco de la semana poco importó ya que la sede del torneo era un gimnasio techado, que es parte de un recinto que comprende diversas instalaciones y donde diariamente paseaban cientos de jóvenes deportistas de distintas especialidades para sus entrenamientos, a los cuales no les importaban demasiado los grandes afiches y par de stands de auspiciadores que se instalaron.

Los jugadores de esta parte del mundo no respondieron a la “localía” y así sólo un tenista sudamericano, Thomaz Bellucci, participó del evento y más encima fue como invitado de la organización. Los que dominaron el evento en número fueron los alemanes con tres representantes, y de hecho uno de ellos, Cedrik-Marcel Stebe, se quedó con la corona, y con 21 años mostró enormes condiciones y un futuro muy alentador para meterse en un plazo de dos años entre los Top 30 del planeta.

La presencia de europeos terminó favoreciendo el tipo de superficie que fue una cancha dura, que no era muy rápida, ideal para partidos atractivos sin ser demasiado tediosos con puntos cortos. La acomodación para el tenis fue novedosa ya que es un recinto donde se juega principalmente voleibol y algunos otros deportes donde los brasileños suelen destacar.

Como buenos sudamericanos, el ánimo del público fue de acuerdo a la presencia de su estrella local: para sus partidos la capacidad estuvo casi repleta, en horario estelar, y el resto de la jornada la gente no era tanta; sin embargo para las semifinales y la final –donde no llegó Bellucci- hubo un lleno total de una gente ávida por ver tenis en su ciudad, considerando que el ATP de ese país lo estaba albergando hasta este año Costa do Sauipe.

Gimnasio

Foto: Jorge Ducci

Vista externa del Gimnasio Ibirapuera

Justamente sobre eso es la principal novedad: En 2012 el torneo más importante de tenis en Brasil se mudará a Sao Paulo, justamente el Gimnasio Ibirapuera, donde en vez de una cancha dura se pondrá arcilla bajo techo, en una variante inédita en nuestro continente y casi en el mundo entero, que será interesante de ver y podría favorecer la venida de algunos jugadores que no les atrae demasiado la cancha lenta del polvo de ladrillo al aire libre.

Con una organización impecable, un público deseoso de volver a ver tenis de alto nivel y la necesidad de seguir demostrando al mundo la potencia que es Brasil en el deporte para estar a la altura de los desafíos que se vienen, la prueba de las Finales ATP Challenger Tour fue superada y ya esperan con ansias el ATP de febrero de 2012.

Más sobre Tenis

Comentarios Deja tu comentario ↓
Ver Comentarios