Novak Djokovic ganó su séptimo Wimbledon y alcanzó los 21 Grand Slams / www.infobae.com

El cuadro le sonrió, y el cumplió con la tarea. Novak Djokovic venció a Nick Kyrgios y levantó el trofeo en Wimbledon, lo que representa su cuarta corona conseutiva -teniendo en cuenta que en 2020 no se disputó- y su séptima vez en total. Allí se siente como en su casa, en una situación muy similar a la que supo vivir Roger Federer.

A lo largo del partido, que tuvo una duración de 3 horas exactas, el serbio “aprovechó” que Rafael Nadal no se presentó en las semifinales a causa de un desgarro abdominal. Así, le ganó al australiano, en la previa un impensado rival en la definición.

La sensación en el All England fue que la victoria nunca estuvo en riesgo, aun cuando el australiano -para variar, discutió con el juez de silla en más de una ocasión- logró colocarse por delante al llevarse el primer set. El resultado fue de 46, 63, 64 y 76 (3).

De hecho, en el tiebreak del cuarto parcial se notó a un Kyrgios demasiado nervioso, cometiendo errores que no estaba cometiendo hasta allí. Más allá de un potente servicio, con el que conectó 30 aces, el peso del partido lo llevó el actual 3 del mundo.

De esta manera, en el día del 8° aniversario de casamiento con Jelena Ristic, Djokovic se colocó a un Grand Slam de Nadal, quien alcanzó 22 torneos grandes en Roland Garros. Roger Federer se mantiene con 20 certámenes de esa categoría.

Mucha felicidad para “Nole”, quien -al igual que lo ocurrido en el Abierto de Australia- no podrá jugar el US Open por no haberse vacunado contra el COVID-19.

Es decir que, si quiere igualar al manacori, como mínimo deberá esperar al 2023. ¿Podrá finalmente jugar en el país de Oceanía? Tras el espectáculo vivido este año, las autoridades flexibilizarían la obligatoriedad de vacunarse para ingresar.