Nick Kyrgios se deshizo en elogios para con´él mismo, haciendo declaraciones a pura soberbia / www.puntodebreak.com

Es bastante complejo analizar a Nick Kyrgios: no existen registros de tenistas similares a él en el sentido del auto boicot. Es como si, pudiendo trascender por lo bien que juega (porque puede hacerlo), decide dar la nota con sus escándalos y berrinches.

Lo suyo dista bastante de lo que suele llamarse “brindar espectáculo”. Divertir o pretender dar un show en la cancha, apostando a un estilo lujoso, es otra cosa. Kyrgios pierde los estribos muy fácil para terminar escupiendo, insultando a espectadores y rivales y arrojando raquetas o incluso hasta sillas. Poco profesional.

Más allá de haber llegado a la final de Wimbledon -favorecido por el abandono de Rafael Nadal-, donde cayó frente a Novak Djokovic, la primera referencia que se hace sobre él es hacia su costado bochornoso. Gran forma de dilapidar todo su talento.

Y ahora, como para continuar la línea, hizo unas declaraciones increíbles. Por supuesto, haciendo foco en su juego y olvidando lo demás. Sus palabras llegaron  al notar que, para ser cabeza de serie en el US Open, deberá obtener muy buenos resultados en la previa. Esto, por la decisión de Wimbledon de no otorgar puntos.

“Ha sido así durante toda mi carrera. Mis rivales saben perfectamente que, sea o no cabeza de serie, todo depende de mí cuando nos enfrentamos. Si estoy con confianza y logro jugar bien, realmente no tienen mucho que hacer. Ahora seré 60° del mundo, pero yo siempre me siento como un top 10″, dijo a pura soberbia.

Cuando en el 99% de los casos los elogios se hacen para con los colegas, el de Canberra decidió ir contra la corriente: las flores fueron dirigidas hacia sí mismo.

Por mientras, más allá de las creencias y la increíble confianza que se tiene, el australiano sintió molestias en su rodilla izquierda y debió retirarse del torneo de Atlanta.