Kirby no requiere mayor presentación; uno de los iconos de Nintendo, nacido a comienzos de los 90 para la portátil de entonces (Gameboy), ha dejado un legado en el género de plataformas innegable. Kirby Dream Land, el primer título de la franquicia, la idea era más bien sencilla: un rechoncho personaje que iba tomando habilidades diversas en la medida que iba tragando a los enemigos durante el transcurso de la aventura. Ese pilar no ha cambiado hasta hoy.

Así llega Kirby: Triple Deluxe, de la mano de Hal Laboratory, para 3DS llega con cinco modalidades de juego: Story Mode, Kirby Fighters, Dedede’s Drum Dash, The Arena y Dedede Tour, siendo tanto el primero como el último de los nombrados los esenciales para enganchar con el título, siendo el resto un mero adorno estético, que pese a las críticas que se le puedan hacer se agradece para prolongar la vida del cartucho.

La historia carece de un profundo desarrollo, pero la expectativa en torno a este punto no es alta sabiendo el público infantil al que va enfocado el título. Después de un relajante día, Kirby se da cuenta que su casa se encuentra enredada en una especie de planta gigante; para colmo, su némesis de los títulos anteriores, el Rey Dedede ha sido secuestrado por el malo de turno, por lo que nuestro rosado amigo deberá recorrer mundo tras mundo, compuesto de 5 niveles cada uno, para finiquitar este rescate.

A nivel visual es muy similar a lo que vimos en Wii, con una propuesta lineal en dos dimensiones, pero Triple Deluxe destaca por un par de detalles como la “Hypernova” habilidad de aspirar objetos gigantes tras consumir una fruta mágica y que da opciones de ejecutar curiosas opciones.

En un desarrollo de no más de 8 horas, el juego deja con un gusto tranquilo de que entretuvo, sin sorprender más de la cuenta. Tomando en cuenta las limitaciones técnicas de la 3DS tanto más no se hubiera podido hacer y sin embargo se quiso dejar a todos contentos, en especial a los fans de la saga.

Como decíamos anteriormente, el juego consta de más modos aparte del de historia, donde destaca el “Kirby Fighters”, nueva añadidura a la franquicia y en el cual hasta cuatro jugadores pueden enfrentarse en un combate al más puro estilo “Smash Bross”.

El clásico Modo Arena, donde hay que enfrentar de manera seguida a todos los jefes del juego, no logra introducir nuevos elementos y dada su facilidad hace de esta modalidad un tanto sonsa y descartable a la larga.

Opción al final

Al finalizar el juego, nos da una nueva opción: “Dedede´s Drum”, juego donde ocupamos al enemigo de Kirby en una aventura lineal de plataforma donde hay que ir rebotando en tambor tras tambor al ritmo de la música. Un añadidura que se complementa bien y es un descanso al formato tradicional.

La música arreglada principalmente de timbales y pop sintetizado hacen en su conjunto un bonito arreglo que acompaña de manera correcta la puesta en escena.

“Kirby: Triple Deluxe” no se destaca por su dificultad o por romper esquemas en el género, más es un juego simple, lineal y que carece en muchos ratos de un control calibrado en los movimientos (cuando usen a Kirby convertido en vehículo entenderán de lo que hablo), pero que sin embargo deja con un buen gusto y que no nos despega de su atractivo diseño gráfico. Una opción ante el descanso de escasos lanzamientos en el género durante la temporada.