En las artes marciales el código de honor es una ley que pocos se atreven a desafíar. Y cuando eso pasa, nadie queda indiferente.

Una verdadera falta al espíritu deportivo fue de responsabilidad del peleador japonés Daichi Abe, quien cometió una lección antideportiva cuando su rival Marcos Yoshio de Souza se encontraba tendido sin respuestas sobre la lona.

La criticada acción tuvo lugar en el primer asalto de la disputa que se realizó en el contexto del evento Rizin 37 en el Saitama Super Arena de Japón.

En términos deportivos, el ex deportista de UFC no tuvo inconvenientes para derrotar a su rival en el primer asalto de la pelea pactada en la categoría de 176 libras.

Con 30 años, el japonés impuso con rudeza sus términos en la pelea y tras impactar un derechazo directo al rostro, mandó a Marcos Yoshio de Souza directo a dormir inconsciente sobre el piso.

Nada parecía detener la ira de Daichi Abe, porque ni siquiera tener el triunfo asegurado y con su rival noqueado, el peleador detuvo su faena impactando de lleno a su rival con una patada en la cabeza. El árbitro y los asistentes quedaron sin respuestas frente a la brutal acción.

Las redes sociales ardieron con la reacción vivida en la franquicia Rizin, ya que bajo ningún punto de vista es válido golpear un rival fuera de competencia.

Pese a que Abe ya tiene una nutrida experiencia en tres de las principales empresas de artes marciales mixtas (UFC, One Championship y Rizin), no va a estar exento de un castigo por parte de la directiva por el excesivo contacto con el que refrendó su victoria.

Abe tiene un registro de 11 triunfos y cinco derrotas en su historial y una actitud antideportiva que dará que hablar por mucho tiempo: