• José Ernesto Amorós, Ex guía de Emprendimiento
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Hace poco más de un año el vocablo “Emprendimiento” no existía en nuestro idioma español. Obviamente hacía mucho tiempo que  en diversos países de habla hispana utilizábamos esta palabra, pero no fue hasta el avance de la vigésima tercera edición del Diccionario de la Lengua  Española que la Real Academia Española introdujo el término.

Tuve la oportunidad de participar de forma indirecta en las gestiones con la RAE para que finalmente Emprendimiento se incluyera en nuestro léxico.

Foto: El Mercurio

Todos deberíamos estar muy agradecidos de muchos emprendedores.

En su primera acepción Emprendimiento se define como “Acción y efecto de emprender ( acometer una obra)” y en su segunda  como “cualidad de emprendedor”. Emprender (un verbo) en la propia definición de la RAE es “Acometer y comenzar una obra, un negocio, un empeño, especialmente si encierran dificultad o peligro”.

Después de este pequeño ejercicio de lingüística podríamos inferir que el emprendimiento es un medio para lograr algo. Ese “algo” que pueden ser negocios (con fines de lucro) que implican cierto nivel de riesgo y dificultad (no lo digo yo, lo dice la RAE para que luego no me tilden de “neoliberal”) ha sido el motor del progreso económico desde tiempos inmemorables, pero con especial énfasis a partir de la revolución industrial.

Todos deberíamos estar muy agradecidos de muchos emprendedores, ya que gracias a sus emprendimientos hoy podemos tener un sinnúmero de bienes y servicios que sin duda han ayudado al desarrollo de nuestras sociedades.

¿Se imaginan la vida actual sin energía eléctrica? Gracias Tomas Alba Edición, Nikola Tesla o George Westinghouse.

¿Se imaginan no tener vehículos automotores? Gracias Karl Friedrich Benz, Gottlieb Daimler o Henry Ford.

¿Se imaginan un mundo sin computadores personales? (no estaría escribiendo estas palabras). Gracias Thomas J. Watson Jr., Robert Noyce, Gordon Moore, Bill Gates, Steve Jobs o Michael Dell entre otros. O por ejemplo, ¿tendríamos en Chile un sistema de comercio minorista tan competitivo a nivel mundial? Gracias Horst Paulmann o Alberto Solari.

Así, el emprendimiento fue, es y será un motor para desarrollar innovación, generar empleo, progreso económico y por consiguiente desarrollo, es fundamental en la construcción de una mejor sociedad.

Para quienes educamos a las nuevas generaciones de emprendedores, tener la palabra Emprendimiento reafirma nuestro compromiso de usar este medio para formar más y mejores personas.  Pero el emprendimiento también puede ser un fin en sí mismo, pero esta discusión la dejo pera mi siguiente guía.