Tras dos días de deliberación, finalmente el jurado declaró culpable a Donald Trump de 34 cargos, incluyendo falsificación de registros comerciales y pagos, con el fin de silenciar su relación con la actriz de cine para adultos, Stormy Daniels.

El caso se remonta a 2016, cuando el actual candidato del Partido Republicano estaba en medio del proceso electoral, el que finalmente le permitió llegar a la Casa Blanca tras derrotar a Hillary Clinton.

De este modo, se trata del primer ex Presidente de Estados Unidos en no solamente ser juzgado, si no que condenado penalmente por el poder judicial norteamericano.

Para el 11 de julio está pactada la sentencia del juez, a la que el empresario puede apelar, luego de que los siete hombres y cinco mujeres del panel determinaran que le reembolsó US$ 130 mil a Michael Cohen, su abogado, haciéndolo pasar por gastos legales ordinarios.

Dicho monto fue el que se le pagó a Daniels para “comprar su silencio” en medio de la campaña presidencial de hace ocho años, delito que podría conllevar que sea sentenciado a cuatro años de cárcel.

Sin embargo, según informó el “New York Times”, es prácticamente imposible que quede en prisión. La resolución más probable es libertad condicional, la que Trump buscaría revertir.

Una vez que se conoció el veredicto, el ex Mandatario fue enfático en su declaración. “El juicio fue un amaño y una gran vergüenza. El veredicto real lo dará el 5 de noviembre el pueblo de Estados Unidos”, manifestó respecto a las próximas elecciones.