• Maggie Sierralta, ex Guía de Manualidades y Artesanía
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Foto: Marcela Hermida

Cuando pienso en las lámparas Tiffany me pongo a suspirar… lo único que quiero es tener una. Hace muchos años que las busco, son un objeto de culto para mí.

Para los que no saben nada de vitrales solo les adelantare que es una composición muy laboriosa que se forma con trozos de vidrio plano coloreado que se unen mediante tiras de plomo, todo lo cual se fija en el vano con una estructura de hierro o de madera. Lo único que tiene color son las piezas de vidrio; lo demás se ve negro, con lo cual se acentúan los efectos del color.

Foto: Marcela Hermida

Inicialmente se diseña el vitral en un boceto a escala en el que se definen la composición, los colores y los cortes del vidrio. De acuerdo con éste modelo se cortan tantos trozos de vidrio como sean necesarios. Después se aplica a cada uno el esmalte o la grisalla correspondiente y se fija al vidrio sometiéndolo a la acción del calor en un horno. Hecho esto se coloca los trozos de vidrio en el lugar requerido y se unen con plomo. Y luego siguen otros procesos.

Foto: Marcela Hermida

Mi primo Oscar me ofreció hacerme una lámpara y que hiciéramos un trueque por mi cerámica, así que estoy eligiendo un modelo… y buscando mi lámpara adorada, por supuesto que ¡me encontré con alguien a quien traer a Guioteca!

Foto: Marcela Hermida

Marcela Alejandra Hermida, tiene 48 años, es Argentina y vive Buenos Aires.

Heredó la habilidad por los trabajos manuales de su padre, quien ejercía el oficio de la carpintería y ebanistería, que a su vez aprendió de su propio padre.

Antes de dedicarse a su oficio estudió secretariado ejecutivo, inglés y portugués, y también cursó Sicología hasta 3er año. Trabajó en diferentes empresas, sin embargo siempre tuvo la inquietud de realizar algo creativo y personal que la llevara a sentir satisfacción y pasión por lo que hacia.

Foto: Marcela Hermida

Se inclinó por el trabajo en vidrio, material que la sedujo desde un principio y estudió varios años con Paty Serbali un referente de este arte en Argentina. Hay muchas técnicas que seguirá estudiando, y que con la práctica va perfeccionando.

Hace 10 años que ejerce el oficio del vitraux  y se dedica por completo, enseñando y trabajando a pedido y la venta de sus objetos en muestras de artesanía. Participa de los diferentes eventos relacionados a la artesanía, ajustando sus tiempos con su taller y sus alumnos.

Foto: Marcela Hermida

Su proceso creativo comienza como imagen solo en su cabeza y el desafío es plasmarlo en una realidad a través de este material maravilloso que es el vidrio. Utiliza además otras combinaciones como metales y piedras. Debe interpretar el gusto de su cliente ya que el vitraux es un objeto bastante suntuario, no masivo.

Foto: Marcela Hermida

Me comenta que siempre aguarda con emoción el momento de la entrega de una obra, ese instante en el que ve los ojos del cliente y puede captar su satisfacción, esa que produce el encontrar algo que encargó pero que no imaginaba como sería. Le conmueve que aprecien su obra, y es cuando está segura que ha creado una criatura que ha de ser cuidada, apreciada y disfrutada.