Inicio » México » Equipo

Horror en Michoacán: 30 muertos por guerra contra los narcos

Alrededor de 30 muertos hubo en una semana en el estado. La serie de violencia se enmarca dentro de la nueva estrategia federal contra el crimen organizado.

De vez en cuando México destaca en la prensa mundial por hechos no precisamente alegres. La guerra contra el narco que mantiene el gobierno nacional arroja a diario centenas de balaceras, enfrentamientos y muerte. Y eso se nota.

La realidad es triste, pero para muchos que trabajamos en los medios es aún más triste ver cómo autoridades políticas y empresarios de las comunicaciones pactan para ocultar lo que sucede. Hoy me gustaría escribir sobre otros temas: turismo, cine, gastronomía local. Pero cuesta. No se pueden cerrar los ojos.

Alrededor de 30 muertos hubo en una semana en el estado. La serie de violencia se enmarca dentro de la nueva estrategia federal contra el crimen organizado, que básicamente consiste en la militarización de Michoacán y algunos ejercicios de inteligencia destinados a infiltrar a la delincuencia.

Las autoridades no se ponen de acuerdo. El contexto es confuso. El gobernador elegido, el priísta Fausto Vallejo, tiene un permiso especial del Congreso estatal para ausentarse debido a que convalece de un trasplante de hígado.  Jesús Reyna, su reemplazante, dice que su ausencia no afecta los proyectos para el estado.

Violencia México

Foto: Agencias

El Vicealmirante Carlos Miguel Salazar Ramonet fue una de las víctimas de la sangrienta semana.

Mientras, los miembros de los partidos opositores, Acción Nacional (PAN, derechista) y de la Revolución Democrática (PRD, izquierdista), aseguran que hay una relación directa entre la ingobernabilidad y la incertidumbre que acarrea la falta de Vallejo.

Por su parte Jesús Murillo Karam, delegado de la Presidencia de la República (también priísta) en la lucha contra el crimen, admite que la ausencia del gobernador elegido en Michoacán afecta seriamente la estrategia nacional contra la delincuencia organizada.

Pero mientras las autoridades discuten, los delincuentes actúan.

La serie de balaceras comenzó el jueves 18 de julio. En la autopista Siglo XXI que une Morelia con la zona costera del estado, a la altura del Kilómetro 281 sobre el tramo carretero Feliciano–Las Cañas, una emboscada arrojó tres policías y cuatro lesionados. Tras los hechos se incrementaron los operativos de seguridad por tierra y aire.

Cuatro días después, el lunes 22, un grupo de hombres armados atacó a elementos federales que hacían rondines en la zona de Tumbiscatio–Arteaga, en el poblado de Puerto el Mamey. El mismo día se registraron ataques en la zona del Aguaje, en la comunidad del Infiernillo y en el poblado El Carrizo.

La asonada dejó otros dos policías federales muertos y, según las autoridades, también 20 criminales. En un comunicado, la Comisión Nacional de Seguridad, órgano creado especialmente por la Secretaría de Gobernación, confirmó que ese mismo día se registraron seis ataques contra de elementos de la Policía Federal en distintos puntos del estado.

El miércoles 24, elementos de la Policía Federal fueron emboscados en la zona costera del estado, a la altura de la comunidad indígena de Pinchilinguillo. Tras las balaceras resultaron heridos siete elementos de la policía, mientras ese mismo día se reportó un bloqueo en el tramo carretero Lázaro Cárdenas – Colima, en donde los narcos incendiaron dos vehículos para impedir el paso.

Pero la semana de violencia no acabó ahí. El jueves 28 llegó un nuevo ataque. El Vicealmirante Carlos Miguel Salazar Ramonet conducía junto a su esposa por el camino rural que conduce de la Autopista de Occidente.

Violencia México

Foto: AGencias

Alrededor de 30 muertos hubo en una semana en Michoacán.

El militar estaba ahí tras verse obligado a evitar una toma de transportistas en la caseta de peaje de Ecuandureo. Tras internarse por una zona desconocida fue detenido por una guardia de narcos, que –como es costumbre en Michoacán– vigilan el pasado de todos quienes transitan por ahí. Apelando a su condición de militar, Salazar Ramonet se negó. Los narcos lo acribillaron.

Durante toda la semana Michoacán ha sido portada de todos los medios nacionales. Y el asunto no acaba. Al momento de escribir esto permanezco en el periódico en donde trabajo. Al parecer, hay rumores de una nueva balacera. Aún nada está confirmado. Tampoco sabemos si podremos publicar los hechos, o si llegarán nuestros jefes, nos llamarán a una nueva junta, nos dirán: hoy de eso no se publica.

Es un día normal en Michoacán.

Más sobre México

Comentarios Deja tu comentario ↓
Ver Comentarios