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Djokovic recibe otra “botella misteriosa” de su equipo y lo acusan de “hacer trampa”: ¿Qué ocurrió en Australia?

El serbio venció a Grigor Dimitrov en Melbourne aunque, en el medio del partido el público fue testigo de una extraña situación.

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Novak Dokovic recibió una botella con una nota y lo acusaron de "hacer trampa" / www.lanacion.com.ar

Novak Dokovic recibió una botella con una nota y lo acusaron de “hacer trampa” / www.lanacion.com.ar

El tenis de excelencia de Novak Djokovic contrasta, cada vez más, con sus actitudes fuera de la cancha. El serbio es mirado de reojo (en especial desde que decidió no vacunarse contra el COVID-19), aun cuando esto le juega en contra para su carrera.

A esta decisión se le sumó, recientemente, un movimiento -en medio de un partido- que llamó la atención: su equipo le entregó una “misteriosa botella” que, como se explicó, terminó conteniendo una bebida isotónica que está permitida. Muchos acusaron al ex número 1 de haber incurrido en doping, pero todo estuvo dentro de lo legal.

Algo similar acaba de ocurrir en Australia, mientras jugaba ante el búlgaro Grigor Dimitrov, Djokovic recibió otra botella, en este caso con una nota que llevaba un mensaje. Así, los “anti Djokovic” interpretaron que se trató de “coaching ilegal”.

Desde hace un tiempo que las indicaciones de los entrenadores están permitidas y, aunque se entiende como “coaching” a las instrucciones verbales, las reglas no especifican la prohibición de las notas escritas. De acuerdo a Punto de Break, todo queda en consideración del juez de silla, quien lo dejó tomar la botella con la nota.

Además, al igual que en la situación anterior, el supervisor del torneo también aprobó esta jugada de “Nole” y su equipo. En caso de haber considerado que “hizo trampa”, el ganador de 21 Grand Slams hubiese sido advertido con un “warning”.

Como destacó el mismo sitio, el oriundo de Belgrado está pagando muy caro las polémicas que supo protagonizar. En ese sentido, cada situación alejada de lo estrictamente normal, alcanza para sembrar dudas en torno a su comportamiento.

A modo de ejemplo, días atrás, Djokovic debió desmentir una información difundida por diversos medios. Se decía que, en otro partido, decidió ir a los vestuarios cuando no tenía permiso, algo que no ocurrió. ¿El serbio se convirtió en una suerte de “oveja negra” del circuito, y es señalado aun cuando no lo merece? Así parece ser.

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