Con su habitual desmesura, el presidente argentino Javier Milei expresó en entrevista: “Mucho no se puede esperar de alguien que era un asesino terrorista”, en relación con la actividad guerrillera que desplegara en el pasado el actual presidente de Colombia, Gustavo Petro. La respuesta fue la expulsión del cuerpo diplomático argentino en Colombia, decisión que aún no fue comunicada oficialmente.

La guerra en X

De inmediato, tanto el presidente colombiano, Petro, como su ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, salieron a replicar con intensas palabras los dichos de Milei. Se le sumó otro ofendido con anterioridad, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador: “Milei afirmó que soy un “ignorante” porque le llamé ‘facho conservador’”,  recordó

Antes, Milei, había realizado una dura semblanza de Petro: “un comunista asesino que está hundiendo a su país”, y calificado al socialismo como una basura y excremento. A lo cual, Petro había replicado: “Esto decía Hitler”.

Recordemos que varios presidentes latinoamericanos, afines a ideas de izquierda o socialismo, habían calificado con extrema dureza y desprecio al presidente argentino, por sus ideas liberales. También, que desde hace un par de semanas, Nicolás Maduro, desliza públicamente frases hirientes contra Javier Milei.

Algo que hace poco más de dos meses había ocurrido con Lula Da Silva, presidente de Brasil. No es casual que ese grupo de presidentes integren el Foro de San Pablo, que Milei desarmó con su victoria electoral.

Canciller argentina, Diana Mondino.

Un canciller a toda prueba

A todo esto, la Dra. Diana Mondino, titular de la Cancillería argentina, acude presurosa para relativizar dichos y aquietar las aguas turbulentas de la relación latinoamericana. Se le suma que a esta hora, casi las 18 del jueves 28 de marzo, el embajador argentino en Colombia, Alejandro Dzugala, hace 24 horas que no establece comunicación con la Cancillería argentina.

Por lo que mientras se profundiza la crisis diplomática, la canciller Mondino ordenó un sumario administrativo al embajador por incumplimiento de los deberes de funcionario público.

Si bien no se enuncia por ninguna de las partes en conflicto, el trasfondo de estos dimes y diretes presidenciales están relacionados con la decidida acción de apoyo de Javier Milei hacia Israel y su lucha contra el islamismo terrorista. No es casual que los presidentes que le enfrentan son acérrimos enemigos del Estado de Israel.