“Más rápido de lo previsto”, así se refiere, según consigna el portal “RT”, el teniente general estadounidense James Holmes respecto de la modernización militar de Rusia y China.

“Hemos visto que tanto Rusia como China desarrollan sus aeronaves más rápido de lo previsto”, insistió Holmes durante una reunión del Comité de Servicios Armados del Senado el pasado 8 de marzo.

Por su parte, el Pentágono proyecta volver a fabricar cazas F-22 Raptor y conseguir más F-35. En ese contexto, tanto la inteligencia norteamericana como el teniente general estadounidense  ya cuentan con el apoyo del Congreso. Hecho que reafirma el portal “AirForceTimes” al publicar un reportaje relacionado a que los cazas de combate F-35 y F-22 Raptor podrían volver a incrementar su número en el arsenal estadounidense.

“No podemos permitirnos asumir que el enemigo represente las amenazas de las guerras recientes, como tampoco que las futuras batallas no requieran más cantidad de aviones de última tecnología. La estrategia de inversión actual es demasiado arriesgada y lo será aún más en el futuro próximo”, afirmó el senador Tom Cotton, jefe del grupo aeroterrestre del Comité de Servicios Armados del Senado.

El parlamentario fue enfático en recalcar que el retiro de 438 F-15 de la flota estadounidense y su sustitución únicamente por 177 cazas F-22 y F-35 podría ser un gran peligro para EE.UU.

Por su parte, Barack Obama, muy cuestionado en el manejo en su relación con Putin, cambió su opinión respecto de las capacidades militares de Rusia. Esto se debe, principalmente, al éxito de la campaña militar área rusa en Siria.

Las declaraciones, según informa el portal U.S.News, fueron en la conferencia de prensa en la cumbre EE.UU.- Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) en California, donde señaló que es obvio que “un grupo de rebeldes no puede competir con el armamento del segundo Ejército más poderoso del mundo”.