“Una verdadera creyente del nazismo, y como todo fanático, es peligrosa”. Así califica a la hija de Himmler, en un reportaje del Daily Mail, un especialista de la inteligencia alemana, encargado de monitorear a los grupos pronazis. Incluso, el fanatismo de la mujer es tal, que se ha ganado la idolatría de los grupos de extrema derecha quienes le apodan como la “madrina” de los neonazis.

En ese contexto, es sabido que los padres tienen una hija regalona o mimada. Resulta que los nazis no estaban ajenos a dicho comportamiento. Es así que el líder de las SS-Waffen y arquitecto de la “solución final”, Heinrich Himmler, tuvo una hija que es implacable defensora de su padre y del nazismo.

Y es que Gudrun Himmler, hija del ex jerarca nazi, quien posteriormente utilizaría el apellido de casada Burwitz, se convirtió en defensora del régimen que, durante la primera parte del siglo XX, protagonizó una historia de horrores en Europa.

La mujer, quien ahora tiene 85 años, considera que los años del régimen nazi fueron “tiempos maravillosos”. Esto se debe a que era tildada como la “Princesa de Alemania” por sus rasgos arios y el apodo que le tenía su padre.

Asimismo, señala que la figura de su padre ha sido tergiversada por los “enemigos de Alemania”. Y también afirma que su padre no se suicidó, sino que fue asesinado. Dicha teoría difiere de la versión oficial, en la cual Himmler tragó una cápsula de cianuro, mientras permanecía prisionero, hecho que ella niega rotundamente.

Además, Gudrun, según consigna Daily Mail, ha liderado campañas para costear defensas judiciales de ex nazis. Incluso ha encubierto y protegido a antiguos funcionarios de las SS.

El “antes y después” de Gudrun Himmler: