Inicio » Facts » Equipo

Situación económica para el 2025: El informe del Banco Central y las expectativas en el mercado

“Se puede afirmar que la situación de 2025 será muy similar a la que hemos vivido este año, pero quizás con menos esperanzas”, advierte experto.

No solo fue el alza del dólar que, a pesar de que cerró su valor el jueves de la semana pasada en $990,7, sobrepasó los $1.000, un alza no registrada desde julio de 2022, sino también el Informe de Política Monetaria (IPoM) del Banco Central de diciembre de este año, indicó que la inflación superará las proyecciones para fluctuar en torno a un 5% durante el primer semestre de 2025, esto luego de que la variación anual del IPC se ubicara en 4,2 en noviembre y se espera que al cierre de este año sea de 4,8%.

En el informe explicaron que esta trayectoria inflacionaria en el corto plazo responde a una combinación de distintos factores de costos. En una parte, se encuentra la apreciación global del dólar, que ha incrementado, y, por otra parte, el alza de los costos laborales locales.

La mirada de los economistas

Andrés Acuña, Director del Magíster en Economía Aplicada (MagEA-UBB) del Departamento de Economía y Finanzas de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad del Bío-Bío, explica respecto del IPoM de diciembre que concuerda con lo planteado en el informe sobre el comportamiento de la inflación, la cual cerraría con un aumento de 4,8% en diciembre y un promedio anual de 4,3% en 2024.

FOTO_SITUACIÓN_ECONÓMICA_23_DICIEMBRE

Ahora bien, en cuanto al comportamiento inflacionario del primer semestre de 2025, Acuña detalla que “los precios podrían experimentar un alza promedio en torno al 4,58% de acuerdo con mis proyecciones. A su vez, el registro de enero de 2025 podría sorprender negativamente al mercado considerando la tercera alza programada en las tarifas eléctricas, incluso si el Banco Central decide intervenir el mercado cambiario en orden a mitigar la presión alcista del dólar sobre los $1.000, cuyo traspaso al índice de precios (o efecto pass-through) bordea el 1,7%”.

Además, el experto explica que con relación a la trayectoria de la inflación subyacente (o sin volátiles), “esta se encontraría por sobre el rango meta no solo en el primer semestre de 2025, sino que durante gran parte del próximo año, por lo que el margen de acción del Banco Central para acentuar una política monetaria expansiva sigue siendo acotado”.

En tanto, Víctor Salas, economista del Departamento de Economía de la Universidad de Santiago de Chile, puntualiza que en 2025 la economía mantendrá su tendencia de inestabilidad. “Todas las proyecciones indican que estaremos estancados en este nuevo nivel de 2 % de crecimiento del PIB, que hemos alcanzado este año 2024. Y, como la inflación seguirá alta más cerca de 5 %, no se espera que el mercado laboral salga de la situación de fragilidad en la que está”.

Incluso, advierte que “se puede afirmar que la situación de 2025 será muy similar a la que hemos vivido este año, pero quizás con menos esperanzas. Además, estaremos en un período de elecciones presidenciales que siempre ralentiza las economías”.

El impacto para los chilenos

Acuña advierte que el bolsillo de la población se verá afectado negativamente durante el próximo año: “La próxima alza en las tarifas eléctricas y la espiral de costos que esta conlleva provocarán, por ejemplo, un nuevo aumento en los gastos comunes que parte de los hogares chilenos deben financiar cada mes”.

A su vez, señala que es esperable que la inflación de la categoría Alimentos y bebidas no alcohólicas se eleve por sobre el 5 % durante el segundo semestre de 2025, lo que constituye una nueva pérdida de poder adquisitivo para los hogares chilenos.

A juicio de Salas, debido a las proyecciones de la inflación, bajarán las capacidades de compra de los consumidores, en términos reales, “porque lo más probable es que los sueldos no estén subiendo durante ese semestre. Más bien, el reajuste que recibirán los trabajadores por la inflación de 2024 es una reposición de su capacidad de compra a inicios de ese año, antes de que un mayor salario real”.

Sin embargo, explica que “si se logra un ajuste de las presiones inflacionarias durante el resto del año, mejorarán algo las capacidades de compra que tengan los consumidores en 2025, pero esa reducción de la inflación a tasas del 3 %, está por verse”.

Ahora, en cuanto al nivel de endeudamiento, Acuña puntualiza que el débil crecimiento proyectado para 2025, generará un menor dinamismo del mercado laboral, elevando la tasa de desempleo en el segundo semestre del próximo año según sus proyecciones, “esto, sin duda, reducirá la probabilidad de encontrar un empleo en el corto plazo y elevará los niveles de informalidad, incrementando la fragilidad financiera de los hogares de nuestro país, lo que, eventualmente, generará aumentos en los niveles de morosidad por sobre los niveles de endeudamiento”.

Sin embargo, el economista aclara que el escenario internacional podría revertir en parte el negativo panorama para Chile: “Es clave el comportamiento de la economía estadounidense una vez que el gobierno de Trump despliegue la batería de políticas prometidas en campaña. Si estas son exitosas en reducir rápidamente el ritmo inflacionario y recuperar la independencia energética de Estados Unidos, la Reserva Federal podría acentuar los recortes de tasas anunciados recientemente”. Esto mitigaría las presiones inflacionarias de orden cambiario y energético en el país, aclara Acuña.

Más sobre Facts

Comentarios Deja tu comentario ↓
Ver Comentarios