La artista chilena Cecilia Amenábar y Gustavo Cerati (1959-2014), líder y cantante de la banda argentina Soda Stereo, fueron pareja durante más de 10 años y tuvieron dos hijos: Benito y Lisa.

Se conocieron en 1988 en una conferencia de prensa en el Hotel Crown Plaza de Santiago, cuando Cecilia tenía 17 años y Cerati 29. Comenzaron una relación intermitente, viviendo cada uno en su país, hasta que se casaron por civil el 19 de mayo de 1993 en en la iglesia Los Misioneros de Santiago.

La pareja se divorciaría en el 2002, aunque Amenábar se instaló en Buenos Aires para estar junto a sus hijos tras el accidente cerebro vascular que el 2010 dejó en estado de coma al músico argentino.

En una reciente entrevista concedida a Radio 13, Cecilia Amenábar, de actuales 53 años de edad, recordó así el día en que conoció al mítico guitarrista, cantante y compositor de Soda Stereo:

“Era 1988 y como las 12 de día y la nana de mi casa me dice “Cecilia, la llama su tío por teléfono”. Y mi tío me comenta “oye, voy a una conferencia de prensa en el Hotel Crown Plaza; yo sé que te gusta Soda Stereo y me están mandando a reportearlos ¿Te gustaría acompañarme?”. Le dije que sí al tiro, aunque primero tuve que pedirle permiso a mi mamá, porque ella era bien brava.

Me pasó a buscar mi tío y llegamos al sótano del Crown Plaza donde se daban las conferencias de prensa en esa época. Yo era la única chiquilla en la conferencia de prensa, con los pelos así teñidos de blanco, medio new wave, con un vestido negro, y me senté atrás con mi tío, muy piola. Y Gustavo me cachó al tiro, me miró, y no me dejó de mirarme entonces. Yo estaba muy nerviosa y me decía ‘no, no, no, yo me tengo que ir de acá’.

“Termina la conferencia de prensa y yo me paro con mi tío para irme cuando Gustavo viene y me toca el brazo, y me dice ‘Hola, ¿Qué tal? ¿Vos quién sós? porque yo soy Gustavo ¿Cómo te llamas?’ Y me da la mano para saludarme. Yo recuerdo que me temblaban las piernas y le dije que me llamaba Cecilia. Y él me dice “ahora tengo que irme, pero en la noche tenemos un programa (‘Martes 13′, emitido por el canal Canal 13, donde los artistas invitados hacían playback) ¿Quieres venir con nosotros?’. Yo le dije que no podía, que estaba medio enferma, cosa que era verdad, y qué tenía que irme a mi casa.

“Mi tío estaba entrevistando en ese momento a Charly Alberti con esos micrófonos de las radios, y Charly también me miraba, pero a mí me gustaba Gustavo. Y viene Charly, bien vivo, se ve que la tenía clara con tanta gira y contacto con las fans, y se presenta y me dice “Che, Gustavo me dice que no quieres venir a la noche ¿Por qué no vienes con amigas?” y yo le digo, “Si es con amigas, puede ser”, y él me dijo entonces ‘dame tu número de teléfono y te pasamos a buscar’, y Gustavo me dijo entonces “Che, si no venís a la noche, yo no toco”. Se podría decir que Charly Alberty y mi tío fueron los Cupidos de mi relación con Gustavo.

“La cosa es que al final fui con mi amiga Paula Bascuñán, que también era gran fan de Soda Stereo y con la que tocábamos canciones de Dolly Parton y música country en los festivales de colegio. Llegamos al hotel, baja la banda y nos fuimos con ellos al programa ‘Martes 13′ en el auto. Parecía una película, yo no podía creer lo que estaba pasando y ya Gustavo se me sentó al lado, me daba la mano. Y él avanzó porque yo soy retímida; si el varón no avanza, yo no concreto, jajaja.

“Bueno, al final no pasó nada, ni siquiera nos dimos un beso, fue muy adolescente la situación. Al final, después del programa, con mi amiga ya no estábamos yendo y Gustavo me dijo ‘Mañana hago un video en Ritoque (playa de la V Región) ¿Quieres venir con nosotros?’. Yo le dije “tengo una prueba em el colegio, así que no puedo ir”. Y no fui a Ritoque, pero él me llamó por teléfono esa misma noche, volviendo de la playa. Gustavo al final regresó un mes después a Chile para venir a verme.

“Cuando mi mamá cachó que la cosa con él iba en serio se asustó y me lo empezó a rebotar. Me escondía las cartas que me mandaba y colgaba el teléfono cuando me llamaba desde Argentina, porque Gustavo en ese tiempo estaba casado y se estaba separando. Mi mamá me decía ‘¿Qué haces con un hombre casado, Cecilia, 12 años mayor que tú y más encima rockero”. Y mi papá postizo, al ver la pinta de los Soda Stereo en esa época, con esos peinados new wave y el maquillaje que usaban, me decía ‘Pero, Cecilia ¿Cómo te puede gustar si parece un hermafrodita?”, jajaja.

“La verdad es que fue difícil al principio. Yo no podía ir a verlo a Argentina porque era menor de edad, pero tuvimos que luchar mucho por nuestro amor, aunque Gustavo la luchó más que yo. Unos años después, cuando ya quedé embarazada de Benito, mi mamá se entregó, además de que Gustavo era espectacular, excelente papá, a mí me amaba por sobre todas las cosas y la familia de él también eran todos superamorosos. Bueno, cada uno tiene que vivir su historia y luchar por su amor. Puede terminar bien, puede terminar mal, pero cuando hay algo fuerte es imposible pararlo”.