• Jaime ceresa, ex Guía de Lucha Libre
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Un delicado momento está viviendo la WWE con ejecutivos de las cadenas USA y Fox, quienes transmiten los programas Raw y SmackDown!.

Promediando el año pasado, la empresa de Vince McMahon celebraba la firma de dos contratos multimillonarios con ambas cadenas que aseguraban 5 años de transmisión del producto en televisión de amplía audiencia de señal abierta y cable.

Los efectos del Coronavirus cambiaron todo. Al hecho que la empresa no ha podido contar con todo su talento debido a contagios, y la falta de público en sus shows, se suma que la gente simplemente está buscando en la pantalla chica contenidos livianos del tipo comedias, alejados de tramas densas o más bien violentas.

Esto se ha traducido en bajas históricas de audiencia de ambos programas llegando a rátings de 1,5 a 1,7MM de espectadores, siendo que la norma de la Compañía siempre ha sido por sobre los 2,2MM.

Los contratos con ambas cadenas contemplan la posibilidad, en caso de caídas de audiencias, de 3 opciones: 1) Trasladar los contenidos a cadenas de los respectivos holdings de mejor audiencia 2) Congelar los contratos 3) Cancelar los contratos.

Hoy se habla que tanto Fox, como USA evalúan las 3 opciones, ya que existen alternativas de contenidos más baratas, y de mejores resultados a la mano.

Se vienen tiempos delicados para la WWE, donde se deberán tomar decisiones trascendentales, como apostar el todo o nada al WWE Network, como plataforma de transmisión en vivo de todos sus contenidos, algo que la empresa por ahora se ha resistido a realizar, pero que a estas alturas, sería una opción más que viable.