El arte de los videoclips sube, sube y sube el mercurio. Las apuestas son cada vez más zafadas y, por lo pronto, ni las artistas ni los fans hallan ni quieren límites. Entonces, fue Youtube quien puso el suyo: esto no. Pero eso tampoco está bien y la red debió regresar atrás y volver a publicar el clip completo. ¿Qué sucedió? Tove Lo realiza actividades sexuales muy íntimas al final del video de “Fairy Dust”.

La multi premiada artista (una de las más reconocidas a nivel mundial por los Grammy, Globo de Oro, Billboard y demás instituciones de la música) filmó un cortometraje de treinta minutos de duración, una auténtica travesía visual. Dirigido por Tim Erem, la pieza repasa varias canciones de la artista y hace hincapié en la relación lésbica entre la protagonista y Lorna, interpretada por Lina Esco.

Se trata de una pieza de alienación y tendencias autodestructivas en un mundo que no acoge a las dos chicas en cuestión. El cortometraje continúa en excelencia visual y desafío a la moral conservadora, repasa las canciones de “Lady Wood” (salido al mercado el pasado 28 de octubre) y enseña, en general, la primera parte del reconocido disco. El nuevo trabajo de Tove Lo es uno de los más esperados de los últimos tiempos, tal el reconocimiento artístico que obtuvo la sueca en los últimos años. Si bien su nombre aun no es tan conocido en varios países, Tove Lo no ha dejado premio sin ganar.

El clip tiene como invitado al británico Joe Janiak durante el tiempo que corresponde al tema “Vibes”. Pero la sorpresa mayor llegó pasados los treinta minutos. Si las imagenes anteriores escandalizaban, lo que ocurren durante los títulos supera todo lo previsto. La bella cantante realiza actos sexuales mientras suena “What I Want For The Night” (Lo que quiero para esta noche). La escena llevó a Youtube a censurar el final del microfilm durante unos minutos, decisión que le valió críticas de distintos sitios del mundo y la condena unánime de la comunidad artística. Finalmente el video completo regresó a la plataforma. “Polvo de hadas” está online, Tove Lo en boca de todos y la polémica, abierta: ¿hay límites para el arte?