La cultura genera sus propios cuerpos, anticuerpos, ídolos y archienemigos. Frente a estos, todo cede. Incluso, el famoso espíritu democrático estadounidense. Los sectores progres de EE.UU (¿existe eso?) no aceptan al mandatario y disparan una y otra vez contra Donald Trump, como si aún estuvieran en campaña. En este caso, el disparo fue literal: el músico Snoop Dogg gatilla en la cabeza del flamante mr. president.

El magnate hizo lo suyo: su historial como empresario es tan malo que las críticas llovieron desde todos los rincones de la potencia mundial. Bueno, ahí está el problema; desde todos lados no: el blondo mandatario ganó elecciones libres del paraíso de la libertad en el mundo, como gustan llamarse a sí mismos esos mismos sectores. Pero los artistas de las grandes ciudades, músicos y actores, no quieren saber nada con Trump.

Pero a veces se les va la mano y terminan ayudando a quien quieren golpear. En el país de presidentes asesinados a balazos , Snoop Dogg patinó fuera de pista y le dio argumentos al inefable muchacho para indignarse. “¿Podrían imaginarse el escándalo que se habría formado si Snoop Dogg, con su carrera fracasada, hubiera apuntado y disparado un arma contra el presidente Obama? ¡Pena de cárcel!“, tuiteó Trump, furioso, en las redes sociales, no sin algo de razón.

“Snoop no debió haber hecho eso. Hemos tenido presidentes asesinados en este país en el pasado. Si eso lo ve la persona equivocada y se queda con esa mala idea, puede tener un gran problema“, comentó el senador republicano  Marco Rubio.

Pero es que así es el asunto. No hubo portal en el planeta que no hubiera reflejado el asunto; la noticia sobre la polémica es mundial. Los sectores progresistas no comprenden cómo alguien puede haber votado por Trump. En la era de la opinión pública, si no entras con el pie derecho, todo vale. ¿Todo vale?

Este es el video de la discordia: