Dice la leyenda (jamás comprobada, obviamente) que “Garota de Ipanema” es la segunda canción más versionada de todos los tiempos. La primera sería “Yesterday” y la pregunta es obligada: ¿estás estadísticas incluyen a países como China e India? No vamos a entrar en esa aquí. Seamos buenos con los mitos urbanos: demos por cierto que “Garota de Ipanema” es, en efecto, la segunda canción con más ejecuciones y covers de la historia. ¿Te has preguntado alguna vez quién era esa muchacha?

Tratándose de arte, pudo haber sido una ficción, una suma de personalidades que conforma un personaje para una canción. Pero no. No fue así. Esa «garota» existió y, aún existe. Se llama Helo Pinheiro, tiene 76 años y es una personalidad conocida allá en su Brasil natal.

Tom Jobim y Vinicius de Moraes escribieron su mítica canción en 1962, otro mundo, otra era. Antes de que Los Beatles sacudieran el planeta, los artistas brasileños pasaban su verano en el famoso bar Veloso (algo así, justamente, como el Cavern de los Fab Four). El nombre del bar tendría poca vida, por supuesto, y Garota de Ipanema ganaría la batalla. Ipanema era apenas un pueblo con mucha vida nocturna donde el poeta Vinicus de Moraes gustaba de pasar sus tardes junto al musico Jobim.

Helo con Vinicius de Moraes, en algún año posterior a 1965

Con el correr de los días, ambos muchachos comenzaron a recordar a una muchacha que pasaba todas las tardes por la calle Montenegro, en busca de los cigarrillos para su madre. Era Helô Pinheiro (o Heloísa Eneida Menezes Paes Pinto) y cambiaría la historia de la música de Brasil, de la bossa nova, del nombre del bar y del de la calle, claro (hoy Vinicus de Moraes).

La belleza de la jovencita maravilló a los artistas, que se pusieron de inmediato a trabajar con ello en vistas de una comedia musical que componía por aquel tiempo Vinicius, “Dirigivel” (Dirigible). Los primeros bocetos de la canción llevaron por nombre “Menina que passa”. La primera grabación data de 1 de agosto de 1962 y la toma que la haría famosa se daría un año después. Pero ¿qué fue de la muchacha?

Un dato que marca el cambio de los tiempos: Helo era menor de edad en aquel 1962. Y sin embargo, no fue hasta 1965 que se enteró que ella era la “garota de Ipanema”. En ese momento, cuando los medios se enteraron también, su vida cambió.

Helo se convirtió en una reconocida modelo y animadora de TV que atravesó los ’70 a pura fama, hasta llegar a posar, ya con 40 años, en 1987 para Playboy, hito que repitió bien de adulta acompañando a su hija, en 2003. Como empresaria también tuvo éxito y su marca de trajes de baños (también con el obvio nombre) fue un boom de ventas.

Su nombre permaneció en la farándula local y tras haber superado algunas enfermedades, la prensa local se impresionaba con su estado físico superados los 70, allá antes de la pandemia. Los familiares del fallecido Jobim la enjuiciaron para impedirle usar el “Garota de Ipanema”, pero la justicia se lo cedió. Al fin de cuentas era ella y nadie más. Helo Pinheiro, la auténtica garota de Ipanema.