El mundo supo arrodillarse ante Selena Gomez. Ya saben qué significa eso: De pronto los astros se alinean y millones de personas en el mundo, en el mismo instante, enloquecen por alguna celebridad. El talento y el carisma, por supuesto, son importantes en esta implosión el inconsciente colectivo. También ayudan las noticias, los medios, los amoríos y los escándanlos. La persona famosa se expone y expone y de pronto ocurre: esos minutos de fama total, millones que llueven… No es gratis.

Selena Gómez atravesó aquellos instantes. Tras abrirse de la Disney y sus famosas participaciones, Selena abrió una fortísima carrera musical. En aquellos tiempos, también, estallaban las redes. Entre romances de amores frustrados y cuasidesnudos en el Instagram, la jovencita tuvo su gran momento. En 2016 obtuvo la foto con más likes de la historia para su momento, la famosa foto con una gaseosa. Pero ya saben lo que dicen: Llegar puede llegar cualquiera, la cuestión es mantenerse.

Mira también: Las increíbles fotos de Selena Gómez en la intimidad que suman millones de likes

Una operación grave interrumpió aquel momento. En 2017 debió ser sometida a un trasplante de riñón. Aquello también se vio envuelto en rumores de todo tipo: Selena aún no salía de las portadas por su ruptura con Justin Bieber cuando Francia Raisa le cedió un riñón. La cirugía supuso un final de época para Selena.

Ahora, cuatro años después, Selena se ha reinventado y atraviesa un buen momento. Ya mucho mayor, sin esa cara de adolescente, la cantante ha adelantado que tiene corta vida en la música. En los últimos tiempos la vimos feliz en la intimidad de su cocina, armando platos y posando, cada tanto, para exclusivas producciones. Ahora que el turno de Vogue ha llegado, los fotógrafos han captado a la perfección el momento de Selena. Adulta, más reflexiva, relajada, acompañando el paso del tiempo, una inmejorable sesión de una mujer que se reinventa.