Algunas dirán que develar el destino del dinero propio es casi una ofensa, y debo reconocer que no dejan de tener razón de cierta manera.

Sin embargo, distintas investigaciones realizadas en América Latina (por Profeco en México , Insight Tex en Argentina y Adimark en Chile) permiten hacerse de un panorama sobre  en qué gastan el dinero principalmente las mujeres.

Ropa: es sin duda el gran ítem de gastos. Es común que muchas mujeres destinen un día del fin de semana a salir de compras ya que ven la adquisición de nuevas prendas como una forma de desestresarse y también estar al día con lo que se lleva, sin importar el precio o la cantidad de cuotas necesarias para financiarlo.

Productos de cuidado de personal: esto es  lo que vulgarmente se dice “el buen shampoo” y abarca desde cosas muy generales como precisamente ese producto para el pelo, hasta pócimas muy específicas como la crema hidratante para los talones. Y si hay un producto para cada parte del cuerpo, imagínense lo que se puede llevar ese ítem.

Zapatos: podríamos decir que todas llevamos una Imelda Marcos dentro (con una colección de 1000 pares), ya que es común que siempre nos estemos comprando zapatos a pesar de no necesitarlos. Y es que son un complemento necesario (si, necesario) para cualquier look, aunque algunos crean que caemos en el comportamiento obsesivo por ellos.

Maquillaje: como decía una conocida “no podemos andar como la última de la fila”, por eso las mujeres gastamos frecuentemente mucho dinero en productos para maquillarnos. No es que queramos taparnos los defectos, sólo deseamos acicalarnos un poco.

Carteras: casi tan adictivas como los zapatos (y en mi caso mucho más…he llegado a comprar  seis de una vez), las carteras son adquiridas por decenas por muchas mujeres, ya que las ven como un complemento para el vestuario, aun cuando impliquen desembolsar miles de pesos o dólares. Se puede tratar de aquellas que tienen firma de diseñador o en sus copias chinas, no importa una cartera siempre es bienvenida.