Es recordada por muchos como la primera tenista que logró obtener un premio en efectivo igual al de un hombre en un mismo torneo, pero marcó también otro hito: la guerra de los sexos.

En definitiva, Billie Jean-King más que una eximia deportista  fue toda una activista de los derechos de las mujeres en un deporte hasta ese entonces bastante machista.

Billie ganó en total 12 Grand Slam (6 Wimbledon, 4 US Open, 1 Roland Garro y 1 Abierto de Australia), siendo una de las únicas seis tenistas que han conquistado los cuatro trofeos más importantes.

Sin embargo, una de sus victorias más importantes  fue ante un misógino Bobby Riggs, recordado como uno de los mejores tenistas de la década de los 40, tres veces campeón del mundo.

La historia fue esta: Riggs manifestó en reiteradas ocasiones que el tenis femenino no era necesario. Sobraba. Incluso fue más allá y aseguró que “las mujeres apestan”. Billie Jean-King le respondió, y todo terminó en un partido de tenis donde ambos se enfrentaron en septiembre de 1973.

El encuentro se desarrolló en un estadio de Houston, Texas y fue bautizado como La batalla de los sexos.

El partido duró mucho más tiempo que el que los jugadores estuvieron en la cancha ya que se convirtió en todo un espectáculo mediático desde semanas antes.

Y ante 30.472 personas en el estadio, y 90 millones de telespectadores tras el televisor, sucedió que ganó Billie Jean-King en tres sets 6-4, 6-3 y 6-3.

Luego del encuentro, Jean King expresó que para ella esto era más que un simple partido:  “No se trataba de tenis. Se trataba de lograr un cambio social. Eso lo tenía claro cuando entré en la pista”, dijo orgullosa.

Pero ese no fue el único desafío que ganó, ella también logró que las mujeres tuvieran premios en dinero iguales a los de los hombres en los torneos de tenis internacional. Fue en el US Open, Jean King  amenazó con boicotear junto al resto de tenistas femeninas, porque ellas no recibían un premio igual al del cuadro masculino.

Sus argumentos convencieron a la organización, que terminó por convertir el Abierto de Estados Unidos en el primer torneo que terminó con la brecha salarial entre géneros, ofreciendo igualdad en retribuciones a tenistas hombres y mujeres.

Finalmente, dentro de los muchos logros de Jean King destaca el hecho de que lideró la creación de la Women’s Tennis Association (WTA), la organización principal que rige los torneos y el circuito profesional del tenis femenino a nivel mundial, así como de la World Team Tennis League, una liga de tenis profesional mixta que se juega con un formato de equipo en Estados Unidos.