La mujer más joven en sacar una empresa al mercado bursátil estadounidense y la millonaria de menor edad, no heredera. Esos dos títulos son los que mejor describen a Whitney Wolfe, creadora de la aplicación para citas Bumble.

En realidad, Wolfe estuvo también detrás de la creación de Tinder, pero esa es otra historia. La que hoy la tiene en las portadas de las revistas de negocios es Bumble, la que le permitió tener una  fortuna en US$1.500 millones, según Forbes.

Y es que si bien en la actualidad las acciones de su empresa de citas han bajado y se cotizan en US$11,28, cuando salieron a bolsa en febrero de 2023 fueron un gran éxito, llegando a venderse ese día en US$70,31.

Actualmente, la empresa asegura tener 81 millones de usuarios en 150 países y es la segunda aplicación de citas más popular en EE.UU. después de Tinder. Wolfe posee el 21% de la compañía, además de que tiene alrededor de US$100 millones de la venta de una parte de su propiedad a la firma de capital privado Blackstone en 2020, según su family office.

Hay que recordar que la historia de Bumble surgió cuando Wolfe se estaba reconstruyendo, luego de salir de Tinder, la otra aplicación de citas, de la que es cofundadora y ex presidenta ejecutiva.

Wolfe participó en la creación de Tinder, luego de decantarse por el mundo de la tecnología durante su paso por la Universidad, tras varios emprendimientos relacionados con el mundo de la moda.

Sin embargo, su salida del sitio más popular de citas en Estados Unidos no fue fácil. En 2014, Whitney Wolfe demandó a Tinder por acoso sexual, denunciando que su ex jefe y ex pareja, Justin Mateen, la insultó y la bombardeó con mensajes de texto amenazantes.

Aunque la empresa negó tener responsabilidad en el asunto, Mateen fue suspendido y luego renunció a su cargo. La disputa llegó a su fin con un acuerdo extrajudicial que consideró el pago de US$1 millón a Wolfe. Ella declaró unos años más tarde en el periódico The Times que la situación fue muy dura.

Fue así como a los 24 años, esta empresaria, según ha descrito ella misma, despertó una mañana y decidió dar a luz a Bumble junto al multimillonario ruso Andrey Andreev.

Aunque también se trataba de una aplicación de citas, tenía una característica distinta a las demás: solo las mujeres podían iniciar una conversación.

Según Wolfe, la idea era darles un mayor poder de decisión a las mujeres, una fórmula que demostró ser efectiva con el éxito que logró la empresa.

En noviembre de 2019, Andreev se fue de la empresa y un año más tarde la firma Blackstone compró la participación del empresario ruso.

Y si bien, Bumble fue creada como una aplicación de citas, con el paso del tiempo la empresa ha ampliado su negocio. De contactar a potenciales parejas o amantes ocasionales, la aplicación también tiene un espacio para encontrar nuevos amigos, y otro para generar contactos profesionales.

Cabe destacar que además de sus éxitos en el mundo de los negocios, Wolfe es reconocida como una empresaria feminista y ha promovido destacadas iniciativas como una ley en Texas que castiga el envío de fotos que muestran “partes íntimas” con una multa de US$500. En una entrevista con Bloomberg, publicada en enero de 2020, Wolfe recordó el día en que decidió iniciar una campaña contra esas imágenes. “Comenzó cuando irrumpí en una reunión y dije ‘¡Chicos, vamos a hacer una ley y vamos a hacer que sean ilegales!’ “.