• Constanza Pavez, Ex guía de Vida en Santiago
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El cine chileno ha crecido de manera considerable en los últimos 20 años. El cariz y enfoque de las películas también ha sufrido modificaciones, resultando una gran amalgama de alternativas para satisfacer a todos los espectadores. Sin embargo, hay algo que no ha cambiado: el cine tiende a reflejar a la sociedad en que se inserta. Por este motivo es que consideré apropiado hacer un listado de las películas que, a mi juicio, son las que de mejor manera reflejan la vida en Santiago.

1. -Taxi Para 3 (Orlando Lübbert, 2001) “Elige machucao, volante o maleta”. Frase que con el paso del tiempo ya es parte de nuestra cultura nacional, popularizada por el gran Daniel Muñoz en esta cinta que, sin lugar a dudas, es el reflejo de una sociedad aspiracional y endeudada, que busca por todos los medios la “oportunidad” de ascender. La cinta se desarrolla en calles y poblaciones de Santiago, como también en lugares de común encuentro para los habitantes de esta ciudad, como por ejemplo la escena rodada en Fantasilandia.

Foto: El Mercurio

Tamara Acosta y Pablo Macaya son los protagonistas de la tercera historia del Chacotero Sentimental.

2.- El Chacotero Sentimental (Cristián Galaz, 1999). Si bien esta película  se divide en tres historias, es la tercera “Todo es cancha”, la que nos grafica de excelente manera los serios problemas de una joven pareja para desarrollar plenamente su vida sexual ya que viven hacinados y en las denominadas “villas de nylon” y los espacios para la intimidad son ínfimos. A lo largo de la historia vemos reflejada las condiciones de vida en una población de viviendas sociales, con sus desventajas y fortalezas.

3.- Sussi (Gonzalo Justiniano, 1987) Sussi es una muchacha de provincia que llega a probar suerte a Santiago, una vez aquí se encuentra con la dura realidad y conoce la cara amarga de una ciudad donde las malas intenciones abundan. El director intenta acercarnos a las distintas clases sociales existentes en Santiago a través de los diversos escenarios que forman parte de la película como un cabaret y una pensión, entre otros.

4.- Machuca (Andrés Wood, 2004) Dos niños de alrededor de 11 años, Gonzalo Infante y Pedro Machuca, el primero proveniente de la clase acomodada santiaguina, el segundo poblador de una toma de terreno ilegítima, se conocen a partir de un proyecto de integración educativa del Colegio Saint Patrick en el año 1973. Ambos descubren en el otro mundos totalmente desconocidos y se insertan en ellos con naturalidad y emoción, desarrollando una amistad.

Santiago es retratado de manera magistral, no sólo desde sus paisajes como telón de fondo, sino que también desde la complejidad de la efervescencia política existente en el país en ese entonces. Notable escena la de los protagonistas tomando leche condensada en el cerro de la “toma”.

5.- Gringuito (Sergio Castilla, 1998) Iván es un niño de padres chilenos, nacido en Nueva York que llega a vivir a Santiago. El choque cultural le parece muy fuerte, además de sentirse muy afectado por el embarazo de su madre. En un momento Iván se escapa de su casa, se refugia en las calles de Santiago y conoce a “el flaco”. Es así como la película se inserta en distintas espacios de la vida en la ciudad como La Vega y el Cerro Santa Lucía, entre otros.

Más películas que retratan Santiago y sus rincones en una segunda entrega.