La creación de la ruleta, cuyo nombre en francés se traduce como  “pequeña rueda”, se dice que pertenece a Blaise Pascal. Pascal, junto con Fermat, son considerados los primeros en desarrollar las probabilidades al nivel de una ciencia fuera del ámbito de los juegos de azar. Resulta curioso entonces que la ruleta la construyó, no como parte de su estudio de los juegos de azar, sino en su fallida búsqueda de una máquina de movimiento perpetuo.

Desde sus inicios en el 1700 en París, la ruleta tenía los números del 1 al 36 con colores rojo los impares y negro los pares (o al revés) excepto en dos casillas especiales marcadas con 0 y doble 0. Las apuestas posibles consisten en apostar a una o más casillas en ciertas combinaciones prestablecidas y fáciles de comprobar.

Obviamente el pago es mayor mientras el número de casillas es menor. Por ejemplo color paga 1 a 1, es decir una ficha por cada ficha apostaba y pleno (1 casilla) paga 35 a 1. A pesar de que el 0 es par no se paga si sale rojo y lo mismo ocurre con el doble 0. Esta pequeña excepción que parece poco importante es de gran importancia para la casa.

De hecho, si no existieran estas dos casillas, apostar a color sería un juego justo entre el jugador y el casino teniendo tantas chances de ganar como de perder o sea un 50%. Lo cierto es que dado que el casino juega solo contra todos los jugadores esto podría generarle pérdidas al casino en el largo plazo.

Las ganancias de la casa

No hay que olvidar nunca que las ganancias de la casa no provienen de lo que le gana a un jugador, sino de lo que gana con todos juntos. Por ejemplo, imaginen que un grupo de 38 personas se ponen de acuerdo y cada uno apuesta a un pleno diferente del tablero de modo de asegurarse que alguno de ellos va a ganar. No importa el número que salga, hay 37 fichas que gana la casa y el ganador recupera su ficha y gana 35. En total entonces la casa gana 2 fichas y el grupo pierde. Cada vez que sale color, por ejemplo, los que apostaron al color contrario le dan fichas a la casa que compensan las que pagaron al color correcto y además cuando sale 0 o doble 0 pierden todos.

Existen muchos libros mágicos que supuestamente enseñan cómo ganar dinero con la ruleta. Varios se basan en una estrategia cooperativa con colusión entre varios jugadores, cosa que los casinos no permiten y vigilan. Otras se basan en estrategias que requieren de un capital infinito para ser realmente seguras en que se apuestan cada vez más fichas.

Lo cierto es que la ruleta es la madre de todos los juegos de azar y sin lugar a dudas un excelente negocio para sus dueños y la causante de pocos millonarios y muchos arruinados. Los detractores más religiosos de los juegos de azar siempre hacen notar que la suma de los dígitos del 1 al 36 es 36*37/2=666.