• Humberto Almonacid, ex guía de Crecimiento Personal
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Uno de los males de nuestra sociedad que ha ido en aumento es la pobreza de tiempo o “CronoPobreza”. Hemos sido testigos privilegiados de cómo las oportunidades han aumentado, la economía de la mayoría de los países ha prosperado y el acceso a la educación ha permitido conseguir más y mejores empleos. Sin embargo, a pesar de tener más recursos económicos disponibles, una gran parte de la población declara abiertamente que “no tienen tiempo para disfrutar de sus logros con sus seres queridos y difícilmente pueden desconectarse de esos trabajos que le proporcionan la seguridad que tanto buscaban”.

Somos ricos en dinero, pero pobres en tiempo, hemos perdido la capacidad de disfrutar y conectarnos con las cosas simples de la vida, buscamos bienestar en lo material y en lo superficial, que aunque considero importantes, deben complementarse con otro tipo de actividades que aporten real valor a nuestras vidas.

Partiendo de lo anterior, fue que decidí escribir un libro relacionado con este tema. Ya hace casi un año que se publicó Optimezation y de verdad que ha sido un viaje maravilloso. En los últimos meses he podido validar de manera concreta lo que se planteó desde un principio, lograr que las personas puedan ser más productivas y, al mismo tiempo, tuvieran la oportunidad de incrementar sus niveles de satisfacción y bienestar personal.

Además, he tenido la maravillosa oportunidad de aprender y adaptar muchas herramientas provenientes de la psicología e informática que potencian el modelo básico de Optimezation basado en neurociencias, coaching, PNL y lean Thinking, logrando mejores resultados, con menor esfuerzo, favoreciendo bastante al proceso de implementación, ya que es posible eliminar al mínimo las urgencias e imprevistos, optimizando actividades y haciendo que las mejoras sean sustentables.

En este camino he aprendido muchísimas maneras de ser más productivo y feliz, por ello, a continuación quiero compartir contigo las 7 que considero más relevantes y difíciles de poner en práctica, para que puedas usarlas con tu actual sistema de gestión personal o administración de tiempo y así tengas la oportunidad de entender que el tiempo es lo más valioso que posees como ser humano y, por eso, “si cuidas tu tiempo, estas cuidando tu vida“.

1. Libera tu mente de todo lo que te molesta. No hay nada más molesto que un pendiente repitiéndose en tu cabeza. Anota todo lo que tengas que hacer para convertir el trabajo en algo tangible que puedas gestionar y no solo pensamientos que aparecen de forma fugaz y te atormentan a cada instante. Nuestra atención tiene una capacidad de procesamiento limitada que va disminuyendo a medida que pasa el día, por eso, cuando aparezca una nueva idea, una cita o una actividad para coordinar, regístrala en algún medio y sentirás un tremendo alivio.

Consejo: Actualmente existen muchas herramientas digitales con las que puedes contar para ayudarte con esto, yo recomiendo usar la aplicación Wunderlist que me ha permitido obtener excelentes resultados.

2. Ten siempre tus metas finales en mente. Todo en la vida debería partir con metas y sus respectivas tareas para convertirlas en realidad, es a eso lo que llamamos un plan. Si lo haces, la brújula de tu vida tendrá un norte hacia donde apuntar, generando dirección y sentido, nada más importante que eso, ¿qué quieres alcanzar? y ¿para qué lo quieres alcanzar?, las respuestas a esas dos preguntas son las que aportarán la motivación e inspiración necesaria para que puedas lograr cualquier cosa que te propongas.

Consejo: Es mejor escribirlas, tenerlas a la vista y revisarlas periódicamente para que puedas activar tus niveles subconscientes, de estas forma, las tareas asociadas podrán convertirse en hábitos que te llevarán a alcanzar el éxito. Un último consejo respecto a este punto; “piensa en largo y actúa en corto”.

3. Define y establece una rutina de poder. Muy relacionado con lo anterior, ya que una vez establecidas tus metas, identifica todas esas actividades que aportan más valor a tu gestión personal diaria y conviértelas en hábitos que puedas mantener en el tiempo, te aseguro que notarás inmediatamente la diferencia. Muchas de las actividades que hacemos regularmente las tratamos como si fueran esporádicas, sin darnos cuenta que podríamos convertirlas en hábitos y apalancarnos hacia el éxito constante y duradero. Si quieres una vida tranquila, te bastará solo con adquirir, aprender y usar nuevas herramientas de productividad, pero si quieres alcanzar las estrellas, cada día de tu vida deberá comenzar y sustentarse sobre hábitos de excelencia.

Consejo: Definir tu rutina de poder, te mantendrá en el camino de aquello que quieres lograr, no es necesario que ocupen todo tu día, sino aquellos momentos importantes. Te doy un consejo extra, elige las canciones que más te gusten para generar una Playlist de poder en Spotify que te acompañe al empezar el día y en esos momentos de mayor productividad e inspiración.

4. Enfócate en un proyecto a la vez, pero toma decisiones masivas de forma correcta. Evita ser una persona multitarea, a menos que sea extremadamente necesario o se trate de actividades muy sencillas, ya que al cambiar de una actividad a otra puedes perder hasta un 60% de tu tiempo por el temido efecto diente de sierra, debido a que tu mente necesita procesar la información necesaria para retomar la actividad en donde habías quedado.

Por otro lado, cuando tengas claro que debes tomar una decisión, actúa de forma proactiva en todos los frentes posibles y observa si existen características especiales o similitudes para generar cambios futuros en otras áreas de tu vida que puedan aportar beneficios inesperados. Muchas personas han perdido grandes oportunidades por no tomar la decisión correcta en el momento correcto, ya que se diluyen en muchos proyectos, que no te pase lo mismo, recuerda que la suerte no es algo al azar, sino que es el momento exacto en donde la oportunidad se encuentra con la preparación.

Consejo: Para evitar multitarea, puedes identificar aquellas actividades que puedas delegar o automatizar, hay muchas formas de hacerlo hoy en día, puede que tu tiempo sea demasiado valioso para llevar a cabo algunas cosas y lo estás desperdiciando poco a poco sin darte cuenta.

5. Clasifica, categoriza y etiqueta. Si no sabes a donde pertenece una actividad, tampoco sabrás qué hacer con ella. Define un método de clasificación que te permita distinguir las características especiales que posee cada actividad en particular. De esta forma, podrás tomar decisiones sobre las acciones necesarias, los recursos y las personas idóneas para ayudarte a completarlas. Puedes perder tiempo valioso por no conocer el origen que da lugar a tus temas pendientes, teniendo la tendencia de atenderlos de forma improvisada y poco productiva.

Consejo: Puedes usar algún método de clasificación de actividades como un tablero KanBan que te ayudará además a tener una visión divergente de tu plan de vida. Existen aplicaciones como Trello, Asana o Pipefy que pueden ayudar de igual manera en este proceso, aunque no cambio el tablero físico.

6. Mejor hecho que perfecto. Hasta la acción más pequeña, es más valiosa que la intención más grande. Aprende a tomar acción independiente del contexto. Nunca estarán las condiciones perfectas para desarrollar una actividad y si lo están, te puedo asegurar que la oportunidad de hacerlo ya pasó. No caigas en parálisis por análisis, actúa y verás llegar esos resultados que tanto necesitas. Dicen por ahí que al universo le encanta la acción, yo creo que es una consecuencia de decidirse a actuar en busca de tus sueños, acuérdate de mí cuando empiecen a llegar oportunidades inesperadas que se relacionen con aquello que quieras alcanzar.

Consejo: Aprende a evaluar beneficios y pérdidas con poca información disponible, desarrolla tu capacidad de análisis y conéctate con tu intuición. Poco a poco verás cómo tu toma de decisiones empieza a mejorar. Ten cuidado con los llamados “sesgos cognitivos”.

7. Respira profundo, contempla y sé feliz. Tanto la felicidad como el éxito son algo subjetivo que dependen de la percepción de cada individuo. Un cuadro de estrés podría bloquear tu capacidad de percibir los aspectos positivos que te rodean. Por eso, si fueras capaz de controlar los efectos nocivos del estrés, estoy seguro que nadie podría detenerte en la búsqueda de tus sueños. Por lo mismo, uno de tus objetivos de ahora en adelante, será aprender a relajarte, buscar lo bueno de cada situación y disfrutar de lo que haces, independiente de las circunstancias.

Algunos estudios indican que más del 60% de la población no está conforme con su trabajo y por eso existen muchas personas que han renunciado a su búsqueda de la felicidad, se conocen como los “working dead” o “zombies laborales”. Te invito a reflexionar sobre lo siguiente: cuando a alguien disfruta lo que hace, se nota, pero cuando no lo disfruta, se nota aún más. Si te centras solo en ejecutar y llenar tu agenda de actividades, al poco tiempo terminarás quemado y sin motivación, reflejado en las declaraciones de hace unos días del famoso dueño de Tesla y SpaceX, Elon Musk, quien indica que está pasando por uno de los peores momentos de su vida por trabajar tanto. Recuerda que eres un ser humano integral y no una máquina.

Consejo: Toma algo de tiempo para aprender a respirar y contemplar las cosas maravillosas que están a tu alrededor, enfócate en lo que tienes y puedes hacer, no solo en lo que te falta. Te dejo una pista; apreciación interna y contemplación externa.

Espero que todos estos consejos te sirvan para ponerlos en práctica y puedas alcanzar esos objetivos que tanto deseas lograr. Ya estamos entrando a la última etapa del año, donde tendrás la oportunidad de quemar los últimos cartuchos para cumplir tus metas personales, pero eso sí, sin olvidar de disfrutar del camino de la vida.

Que estés muy bien, nos vemos en la próxima entrada y que la productividad esté contigo.